El Premio Sebastiane Latino es un galardón anual otorgado por la asociación Gehitu al largometraje latinoamericano que mejor represente la defensa de las reivindicaciones y valores de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales. El jurado está compuesto por expertos en cine latinoamericano LGBTI (Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales) y miembros de GEHITU (Asociación LGBT del País Vasco). Tras visionar la mayor parte de la producción del año, al jurado le gustaría destacar las películas centradas en personajes femeninos que retratan la realidad íntima de mujeres transexuales. “Son retratos alejados de estereotipos como el de la prostitución, aunque sus personajes se convierten en el centro de historias donde muchas veces su cotidianidad les es adversa”, señala el jurado.
La androginia y el mundo drag también han tenido una fuerte presencia, explican, “mostrando lo fina que puede ser la barrera que separa un sexo de otro. Esta indefinición, un tercer sexo, es una búsqueda de la identidad propia que va más allá de lo físico o de las etiquetas, porque lo que siempre subyace debajo es sólo el ser humano”.
Las llamadas “nuevas formas de familia” asimismo siguen presentes, “mostrando que ya no son tan novedosas sino variantes emocionales válidas”, concluyen.
Las películas finalistas del V Premio Sebastiane Latino son:
Corpo Elétrico de Marcelo Caetano (Brasil)
Elías es nuevo en Sao Paulo, trabaja sin descanso en una fábrica de telas y aprovecha su tiempo libre para tener escarceos amorosos con otros hombres. Se acerca el verano, el calor aprieta y hay que terminar el trabajo antes del final de temporada. Y con muy poco tiempo libre Elías intenta encontrar su lugar en antiguos y nuevos círculos de amigos que son maneras de enfrentarse a la soledad.
Primavera de Santiago Giralt (Argentina)
Historia coral que trata de mostrar que las familias atípicas tienen los mismos problemas que todas las demás. Toma como eje a Leopoldo un niño de 11 años que creció rodeado de artistas. Durante los tres meses de la primavera (la película comienza el 21 de septiembre y termina el día de Navidad), el chico descubre el amor y vive su primera desilusión amorosa.
Señorita María, la falda de la montaña de Rubén Mendoza (Colombia)
En las montañas de Boavita, un pueblo campesino, conservador y católico, vive la señorita María Luisa. Tiene 44 años y aunque nació siendo niño, se viste y se siente como una mujer. Solitaria y negada desde pequeña, María Luisa ha encontrado dentro de sí misma y en los pequeños gestos de solidaridad de su entorno, una fuerza inquebrantable. La fe en la virgen María y el amor por los animales, son otros de los asideros de este personaje entrañable.
Un retrato perturbador y de intensa humanidad que nos obliga a ser testigos de lo siniestro y de lo hermoso, de la natural y de lo cultural, de lo que es único y no puede ser negado y de la fuerza de lo colectivo.
Una mujer fantástica de Sebastián Leilo (Chile)
Marina, una joven camarera de noche, y Orlando, veinte años mayor que ella, planean una vida juntos. Orlando no se siente bien. Marina lo lleva a urgencias pero Orlando muere al llegar al hospital. Sin embargo, en lugar de poder hacer su duelo, Marina, por el hecho de ser mujer transexual, tendrá que enfrentarse contra las mismas fuerzas con las que ha luchado toda su vida para convertirse en lo que es ahora: una mujer compleja, fuerte, pasional… fantástica.
El diablo es magnífico de Nicolás Videla (Chile)
Manu es un ser andrógino, afeminado, pero que no renuncia a su sexo, más bien prefiere ignorarlo. Inmigrante chileno en París que está cansado de la hostilidad e inestabilidad en la ciudad, decide volver a Chile, tras diez años en Francia. En estos últimos días recorrerá distintas rutas que hablan de amor y sexo.