Una familia viaja a una remota isla en el sur de Chile. En el viaje pretenden convencer a los abuelos para que los apoyen económicamente para construir un hotel en el lugar. Nicolás, el hombre que los llevó en bote, desaparece, dejando a la familia atrapada en la isla, las sonrisas empiezan a desaparecer. Con frío, sin agua y sin certezas, los ánimos se diluyen, dejando al descubierto las tensiones que esconde cada integrante de la familia. 

En el preludio del siglo XX, Pedro llega a Tierra del Fuego para fotografiar el enlace de Mr. Porter, un poderoso latifundista, con Sara, una niña que se convierte en su obsesión. Tratando de capturar su belleza inocente, traiciona al poder que domina este territorio y que le despoja de sus privilegios obligándolo a integrarse en una sociedad que convive con el genocidio de los nativos SelKnam, del que acaba siendo participe y cómplice por medio de sus imágenes.

Selva (13) descubre que al morir solo cambiamos de piel. Nos podemos convertir en lobas, cabras, sombras, o en todo lo que la fantasía nos permita ser.

Helen (9) vive en un cortijo (vivienda en condiciones deficientes ubicada en una zona de alta densidad urbana) en el centro de la ciudad de Sao Paulo. La niña vive con su abuela, Doña Graça, que también cumple el papel de madre y padre y sostiene a la familia por medio de trabajos sin contrato, principalmente vendiendo espetada de carne. Aún muy ingenua, su principal preocupación es el regalo para el cumpleaños de su abuela: un kit de maquillaje. La niña concentrará todos sus esfuerzos en conseguir el dinero y garantizar el regalo. A partir de esa búsqueda la película desvela la vida cotidiana típica de quien vive en los cortiços, construyendo una historia colectiva a partir de la red de relaciones que la niña establece.

Emilia recibe una invitación para regresar a su pueblo natal en la Patagonia y esparcir las cenizas de Andrea, su mejor amiga. Emilia pone en pausa su vida y viaja para la ceremonia. La nieve y el viento del sur son el escenario de un viaje al pasado en el que revive su amistad con Andrea, acompaña a su familia en el duelo y se reencuentra con Julián, su primer amor, quien acaba de ser padre. Emilia esparce las cenizas y con ellas dejará ir su pasado, su familia, el sur y, también, el amor.

Desplazados por la violencia que arrasó con su pueblo, Paloma y Lobo sobreviven intentando amarse. Entre la sed, el miedo y la nostalgia, Paloma desea regresar a casa pero Lobo vive atado a un recuerdo que le impide volver.