"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
“Sorprende que una historia cotidiana sin acción y violencia haya conectado con tanta gente en mí país”, cuenta la directora de Little Forest. La propuesta cinematográfica que veremos hoy en Culinary Zinema ya ha sido presentada en Corea del Sur y la buena acogida por parte de la crítica y, sobre todo, del público, ha superado las propias expectativas de su realizadora, Yim Soonrye.
Es posible que mucho de ese público haya podido verse identificado con la protagonista del film, una joven sin trabajo ni perspectivas de futuro que decide volver a su pueblo natal para vivir del campo. “Por mi trabajo me relaciono con mucha gente de esa edad y, por desgracia, todos ellos están encontrando importantes dificultades para sacar adelante su proyecto de vida”, asegura la realizadora. Para Yim Soonrye no es un problema solo de Corea del Sur, “es un problema global y la culpa es del neoliberalismo”.
A través de este largometraje, la realizadora ha querido mostrar que existe una alternativa al modelo de vida actual y que de una forma mucho más sencilla y austera es posible hallar la felicidad. “Con esto no quiero decir que todos los jóvenes deban hacer lo mismo que la protagonista del film, pero sí que existe esa opción”, apunta Soonrye. Además, en el film, la vuelta al campo ayuda a la protagonista a superar un trauma personal: el abandono de su madre.
Durante el metraje, la joven protagonista prepara apetitosos platos elaborados con los productos que le da el campo a lo largo de las distintas estaciones del año. Dado que antes de empezar a rodar, Kim Taeri, la actriz principal, nunca había cocinado, la directora reconoce que tuvieron que darle unas clases prácticas. “Por suerte, aprendió rápido y enseguida se vio que era mañosa para la cocina”, afirma Soonrye.
Tampoco fue fácil encontrar el pueblo donde se desarrollaría la historia. Según la cineasta debía cumplir dos requisitos: “que fuera bonito y que tuviera las estaciones del año muy marcadas”. Pero quizá aun más importante era dar con la casa idónea. Esta tenía que ser de tipo Hanok, el estilo arquitectónico tradicional, y soleada. Por todo ello, tardaron más de tres meses en decidirse por uno. Finalmente, el pueblo elegido fue GunwiGun en la provincia de Gyeongbuk.
Yoon Soonrye debutó en el cine en el año 1996 con la película Sechinku. Previamente había rodado un cortometraje que logró llamar la atención de los productores. Soonrye opina que en la actualidad el camino que tienen que tomar los cineastas jóvenes es prácticamente el mismo, “solo que antes en mí país se prestaba atención al cine de autor y, ahora, por desgracia únicamente se apoya al cine comercial”.
La cena inspirada en esta película asiática será la única que no se celebrará en el Basque Culinary Center. Será en el ni neu del Kursaal y, como viene siendo habitual, Mikel Gallo y su equipo han invitado a un cocinero externo para que les ayude en la confección del menú. En esta ocasión, trabajarán junto al chef coreano Luke Jang, quien acaba de inaugurar Soma de Arrando en Madrid. Vista la pinta que tienen los platos en la película, lo cierto es que el banquete promete.
Iker Bergara