La argentina Mercedes Córdova presenta hoy en Culinary Zinema su ópera prima, E il Cibo va, un “relato ensayístico” que trata de determinar cuál ha sido la influencia alimenticia de los emigrantes italianos en el continente americano y su vínculo con la cocina italiana actual. “Antes de empezar a rodar construimos una hipótesis y después con las cámaras fuimos a comprobar si se cumplía o no, presentando puntos contrapuestos que finalmente nos llevarían a una conclusión”, expone la realizadora.
Así, su documental se aleja de esa corriente actual que defiende la pureza en la gastronomía y en el producto. “La cocina es de la gente. La cultura gastronómica de un pueblo es el resultado de su evolución y circunstancias a lo largo del tiempo. No importa tanto cómo era originariamente tal o cual receta”, explIca Córdova. “De alguna manera es una película proglobalización que abraza la idea de que todos somos de todas partes y no hay que luchar contra eso”, señala.
“La gastronomía sobre todo me interesa como un vehículo de identidad, como una forma de entender la sociedad en la que vivo”. Por ello, el trabajo de Córdova no se centra tanto en platos o recetas sino más bien en las personas que cocinan y preparan esas recetas. Gracias a un equipo muy pequeño, Córdova ha logrado con su cámara mostrar con total naturalidad a cada una de las personas que aparecen en el largometraje. “Cuando grabas a alguien haciendo lo que le gusta, la cosa fluye. Por eso en el film hay muchas escenas de gente cocinando y que hemos tenido que cortar una vez habían terminado. Fuera del contexto de su vida cotidiana, las personas se tensan más”, dice.
PUESTA DE LARGO
Córdova todavía no ha mostrado la película a nadie, ni en Argentina ni en ningún otro sitio. Hoy será su presentación oficial ante una audiencia. La realizadora sabe que es una producción que principalmente va a interesar a italianos, argentinos e italoamericanos. No obstante, considera que trata “un tema muy universal” capaz de conectar con todo el mundo y, especialmente, con pueblos de pasado emigrante. “Es curioso cómo la gente cuando emigra lo primero que echa en falta, además de los vínculos afectivos, es la gastronomía. Podemos vivir un montón de situaciones extremas pero no podemos privarnos del placer de la comida”.
Aunque el trabajo le ha llevado varios años de su vida y en ocasiones no ha sido fácil, Córdova ya prepara su segundo largometraje, también de temática gastronómica. “Se llama Masa madre y es un proyecto documental que cuenta la historia del pan desde un perspectiva de género, desde la invención de la agricultura en los albores de la civilización hasta hoy. Soy mujer y me interesan las luchas feministas”, cuenta. Habrá que ver cómo evoluciona este interesante proyecto que podría encajar en futuras ediciones de la sección Culinary Zinema.
IKER BERGARA