"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Pocos han sabido ilustrar de una manera tan afilada el absurdo de la guerra como Danis Tanovic en la magnífica En tierra de nadie (2001), con la que obtuvo el Oscar a la mejor película extranjera y que constituyó una de las obras más importantes sobre la Guerra de los Balcanes junto a la de su compatriota y enemigo ideológico Emir Kusturica, Underground (1995). En cualquier caso, aunque sus enfoques y estilos fueran diferentes, lo cierto es que ambos han utilizado la alegoría política para configurar sus ficciones alrededor de la brecha identitaria que sacudió su país, Bosnia, durante el conflicto bélico.
Es lo que ocurre en Cirkus Columbia, en la que el director compone su relato a través de las tensiones que se desencadenan en una familia descompuesta veinte años atrás, durante la dictadura comunista de Tito, que vuelve a reencontrarse tras la vuelta de su progenitor justo en los albores de la contienda tras la separación de Croacia de la antigua Yugoslavia.
Tanovic utiliza el drama cotidiano, tiznado de sarcasmo tragicómico, para enmarcar ese polvorín de odios enquistados que comienzan a revelarse entre los habitantes de la localidad, al mismo tiempo que emplea el relato romántico y de juventud para añadir un contrapunto de ligereza y esperanza dentro de ese espacio de violencia y caos que está a punto de desencadenarse. Así, el director intenta captar la idiosincrasia de su pueblo y abrir caminos hacia la reflexión en torno a los dilemas morales que subyacen en unos personajes condenados por el odio y quienes se les ofrece una oportunidad de reconciliación.
BEATRIZ MARTÍNEZ