"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Entre Richard Gere y Susan Sarandon existe una química indudable. Se conocen desde hace tiempo y en Arbitrage ( El fraude), película encargada de inaugurar el Festival, trabajan juntos por segunda vez, haciendo nuevamente de marido y mujer: “Es el mejor matrimonio que he tenido”, comentó la actriz entre risas, provocando el asentimiento de su compañero. Pero como en los mejores matrimonios, entre ellos también hay disputas y divergencia de opiniones. “Susan y yo hemos discutido mucho a cuenta de la escena final de la película –confesó Richard Gere–, no entiende la actitud de mi personaje”. “No –le corrigió su compañera de reparto– lo que no acabé de entender es la actitud del mío”.
Dado que se trata de un final abierto y hasta cierto punto ambiguo, el director del filme, Nicholas Jarecki, bromeó sobre la posibilidad de rodar una suerte de secuela donde se muestre la evolución de ese matrimonio ante la promesa de un futuro incierto.
Arbitrage es la historia de un magnate financiero neoyorquino, Robert Miller, acosado en varios frentes: de un lado por sus acreedores ante una operación fallida que le lleva a tener que vender su propia compañía; de otro por sus hijos, miembros de su consejo de
administración que se oponen a esta venta y que terminan por descubrir el fraude encubierto en la misma. También por su amante Julie y finalmente por la policía a cuenta de un accidente automovilístico en el que se ve involucrado.
Según Richard Gere, se trata de un personaje fascinante en su complejidad: “Cuando te
enfrentas a un papel así puedes optar por construir un malo con M mayúscula o bien esforzarte en interpretar a un ser humano. Robert Miller no es un monstruo ni un sociópata, es alguien con muchas facetas y con un encanto natural”. Para Gere laredención es algo que está en la esencia de todo ser humano, afirmación que aun siendo compartida por Susan Sarandon generó un animado debate entre ambos al afirmar la actriz que “no obstante, yo sí creo que existen los villanos, gente sin empatía a la que le importan muy poco sus semejantes”.
En lo que sí coincidieron los dos actores y también su director fue en valorar que la película aborda de manera realista el perfil de estos hombres de negocios, responsables directa o indirectamente, de la actual crisis financiera. “¿Cuántos de ellos han terminado en la cárcel?”, preguntó Nicholas Jarecki al ser inquirido sobre si su protagonista no hubiera merecido un final más ejemplarizante. “En esta situación el sistema judicial de EE.UU no ha funcionado bien”, comentó Richard Gere, mientras Sarandon recordó que muchas de estas figuras no sólo no han recibido castigo sino que han sido recompensadas con puestos relevantes en la Administración y en otras corporaciones.
“Cuando rodamos la película –precisó su protagonista masculino– pensamos que se trataba de una historia muy interesante para el espectador teniendo en cuenta la situación actual pero, honestamente, también creo que se trata de un filme con un alto valor en lo estrictamente cinematográfico”.
Ambos intérpretes también tuvieron tiempo de repasar la evolución de sus respectivas
carreras. Susan Sarandon para defender su empeño por participar en proyectos diversos y definirse como “una actriz de personajes con una trayectoria bastante poco ortodoxa”.
Sobre este particular, Richard Gere recordó lo mucho que le emocionó ver el vídeo que
los responsables del Festival prepararon hace cinco años cuando le concedieron el Premio Donostia: “Viendo aquellas imágenes asumí mi propia evolución como actor”.
J.I.