"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
“Mi película no es un musical, aunque la música tiene un papel fundamental
en ella, es su hilo conductor”. Ciro Guerra presenta en Los viajes del viento la peripecia que viven Ignacio Carrillo, un veterano juglar que toca vallenatos, y su discípulo Fermín, que con su acordeón recorren la región norte de Colombia desde Majagual hasta Taroa.
El director colombiano ha ambientado la historia en 1968,“año del primer Festival de Música Vallenata de Valledupar, que inició la popularización de esa música y le abrió una nueva etapa, con artistas, sellos discográficos, concier tos grandes y emisiones de radio”. Con un juglar como protagonista, Guerra muestra el ocaso de la época de los cantantes errantes que recorrían el Caribe interior llevando músicas, cantos y noticias a los pueblos remotos e incomunicados, y que eran en muchos casos, la única vía de comunicación.
Ciro Guerra (Río de Oro, Colombia 1981), ya es de sobra conocido en el Zinemaldia, donde ganó el Premio Cine en Construcción de 2003 con su primer largometraje, La sombra del caminante. Los viajes del viento ha sido presentada en Cannes y se estrenó simultáneamente en Colombia, donde ya ha sido vista por más de 200.000 espectadores. Con este largometraje, Guerra muestra la tierra de sus orígenes, el Caribe colombiano: “Es una Colombia oculta, desconocida por los propios colombianos, que ha sido descalificada y enterrada bajo el rótulo de folklórica y de pintoresca”. Guerra ha querido
terminar con esa idea y mostrar, a través de esa música, “la arraigada relación del hombre con la naturaleza, y el alma de lo que es el hombre del Caribe profundo melancólico, reflexivo y con gran sensibilidad creativa”. El juglar protagonista está interpretado por el compositor Marciano Martínez,“un músico legendario en Colombia, autor de grandes éxitos de la música popular y con muchos rasgos comunes con el personaje,porque ha sido juglar y es de origen campesino”. Como a los otros actores, Guerra encontró a Marciano en el casting que durante más de seis meses dirigió Juan Pablo Félix (María llena eres de gracia) y en el que buscaron el mayor nivel de autenticidad. Luego,“
durante año y medio trabajamos con ellos para crear y ajustar los personajes al guión, y fueron los actores quienes aportaron toda la riqueza, la variedad y los matices”.
Vallenatos con letras compuestas y aprendidas y vallenatos improvisados en duelos de versos denominados allí “piqueria”, componen la banda sonora de este viaje al corazón de lo que el director llama la Colombia verdadera: “No me interesa hacer películas para cambiar la imagen de Colombia, me interesa más mostrar que muchos de los problemas que tiene el país se deben a que realmente no sabemos quiénes somos y la música es una llave para entender eso y para enriquecernos”.
Pili YOLDI