"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
A menudo la gente se reúne durante un breve momento. Pero rara vez llega a hacerlo tan de cerca como en estos pocos metros cuadrados”. Así empieza, haciendo referencia a un ascensor, Desperados on the Block, la ópera prima de Tomasz Emil Rudzik, que cuenta las historias de Clara, Motek y Sin, tres estudiantes extranjeros que viven en la misma residencia en Munich.
El director vivió en estos mismos dormitorios para estudiantes durante tres años. Después de unos meses se dio cuenta de que la gente no se relacionaba o se movía en grupos muy pequeños. “Lo encontré muy solitario y me di cuenta de que el punto de unión era el ascensor, donde siempre me encontraba con situaciones agradables y el único sitio en el que la gente te hablaba”. Rudzik, para acentuar su experiencia, decidió montar en el ascensor durante una semana cada día de 8h a 20h y así nació este proyecto.
Los tres personajes están basados en gente que el realizador conoció durante este período. A Clara (Patricia Moga), la estudiante de teología católica que decide romper los diez mandamientos, la encontró en las mismas circunstancias que describe la película. “Tocó a mi puerta pidiendo ayuda para reparar su bicicleta, y yo bajé. Empezó a comportarse como en la película, levantándose la falta al invitarme a tomar un té en su habitación y, obviamente, me marché. La situación se repitió con más gente del bloque y me intrigó”. Así decidió hacerse amigo de ella, para poder entenderla mejor, y de ahí surgió Clara un personaje solitario que sólo habla a Dios a la espera de oír una respuesta.
Cuando Rudzik conoció al personaje real de Motek Wajta (Andresa Heindel), pensó que era simplemente una persona antipática porque no le saludaba en el ascensor, hasta que un amigo le contó que era sordomudo, y confraternizó con él. El actor que lo encarna, Andreas Heindel, es un actor sordomudo que tardaron un año en encontrar.“ Cuando vino a hacer el casting, fue increíble, se me puso el pelo de punta y eso es siempre una buena señal”, recuerda el realizador.
El tercer personaje, Sin, es un joven de origen chino que apenas lleva tres meses en Alemania y tiene dificultades de comunicación con una joven alumna a la que da clases particulares.
Esta cinta tan personal le ocupó al joven realizador alrededor de cuatro años. “Cuando pensé en hacer un largometraje me entraron ganas de viajar para conocer y poder aportar más cosas”, recuerda. “Pero me di cuenta que no tenía necesidad de salir de mi propio bloque, simplemente necesitaba el ascensor para encontrar esas historias tan emocionantes”.
Rudzik, de origen polaco, estudió Cultura y Teatro en Berlín, y Cine y Televisión en Munich. Su filmografía incluye varios cortos, entre ellos: Die Schattenboxer (2001), Flaschendreh (2002), Tote Indianer (2003), Garage Love (2004), por el que obtuvo varios premios, y Der Spaziergang (2005).
Tras su paso por el Festival, a Desperados on the Block le espera un largo recorrido por festivales internacionales, como el de Sao Paulo.
Ane Rodríguez