"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
La competición de Nest ha llegado a su fin tras tres días de proyecciones y coloquios en los que hemos podido apreciar la variedad de propuestas cinematográficas de los jóvenes cineastas seleccionados y escuchar sus procesos de trabajos e ideas alrededor de la creación. La última sesión se compuso de tres cortometrajes, muy diferentes entre sí y rodados respectivamente en un bosque de Euskadi, en interiores de Estonia y en las calles de Los Ángeles. La sesión se abrió con un corto experimental que viene desde muy cerca, El tercer paisaje, de Julen Etxebarria, realizado en el marco del posgrado de Creación de Elías Querejeta Zine Eskola. El escenario es el bosque pintado de Oma, obra realizada por el artista vasco Agustín Ibarrola, que pertenece al movimiento Land Art. Los pinos del bosque, afectados por un hongo que ha dañado la pintura, son representados en los que parecen ser sus últimos alientos de vida. La organicidad y materialidad del 16mm empleado para la grabación permiten al cineasta un experimento de réplica del fenómeno de infección del hongo en la piel de la misma película y, a través de su corrupción, evocar la fragilidad y lo efímero de la propia imagen.
El segundo cortometraje, Las valgus paista metsale / Let The Light Rise Upon The Forest de Hanna-Mirtel Paas, directora estonia que actualmente estudia en la escuela Catalyst de Berlín, es un drama familiar enfocado en una joven mujer que tiene que lidiar con la enfermedad y la depresión de su madre. A través de una puesta en escena lúcida pero anclada a los sentimientos, a partir de la frustración y el sentido de culpa que atormentan a su protagonista, la directora realiza un emotivo retrato de la relación entre una madre y una hija.
The Slip, de la estadonidense Alex Sherman, procedente de CalArts, es un corto que funciona como un dispositivo metacinematográfico, jugando con las expectativas del espectador. Funciona como un estudio sobre los códigos y el estilo del cine de género, especialmente el cine crime o thriller, en su tradición estadounidense, a través de figuras arquetípicas y reconocibles. La ciudad de noche, las luces de neón, los zooms, permiten a Sherman dibujar muchas historias posibles a través de elementos recurrentes en el cine, y hacer al mismo tiempo un homenaje a la estética del neo-noir de los años 70 y a las calles de la que Thom Andersen llama “la ciudad más fotografiada al mundo”, Los Ángeles.