"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
El Festival recupera las sesiones de película-ópera china con la proyección, hoy a las 12.30 en los cines Príncipe, de Daughter of Dunhuang, film realizado por Teng Junjie a partir de la ópera de carácter humanista del mismo título estrenada en 2018 en el Teatro Huju de Shanghái. El libreto está concebido como homenaje a Fan Jinshi, una arqueóloga que dedicó buena parte de su vida a la preservación de las cuevas de Mogao, situadas cerca de la ciudad de Dunhuang, en la provincia de Gansu.
Se trata de un conjunto de 492 templos budistas reconocidos por sus murales pintados entre los siglos IV y XIV. Fan Jinshi llegó a las cuevas recién graduada de sus estudios de Arqueología, cuando tenía veinticinco años, y estuvo medio siglo al servicio de la restauración y conservación del lugar. Acabaría convirtiéndose en la directora de la Academia de Dunhuang. Las cuevas de Mogao son conocidas también como las cuevas de los Mil Budas y en 1987 fueron declaradas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
La filmación cinematográfica de esta ópera se ha realizado en calidad 4K y en escenarios naturales, por lo que lejos de tratarse de una escenificación de raíz más teatral, como en algunas películas occidentales que han adaptado obras de Mozart o Bizet, respira en espectaculares escenarios naturales con profusión de movimientos de cámara que recorren la inmensidad del desierto o capturan los agujeros horadados en las rocas que conforman las grutas seculares. La música es muy descriptiva, de carácter tenue y poético.
Mao Shanyu, famosa actriz del Teatro Huju, incorpora al personaje central. No hay un ápice de sofisticación en las imágenes de esta ópera naturalista, ya que la película intenta siempre trasladar al espectador las poco cómodas condiciones de vida que experimentaron los personajes en una tierra tan hermosa como salvaje. A sus 86 años, la verdadera Fan Jinshi aparece en algunas escenas caminando, aun maravillada, por las grutas que tantos años antes descubrió y protegió.
Q.C