"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
La productora María Zamora recibió ayer el Premio Nacional de Cinematografía 2024 de manos del Ministro de Cultura Ernest Urtasun. Cada año el Festival de San Sebastián acoge la entrega de este importante galardón que, a pesar de su carácter institucional, siempre resulta cálido y cercano. Que la homenajeada esté arropada, no solo por las autoridades pertinentes, sino también por familiares y amigos de profesión, es lo que contribuye a crear en Tabakalera esa atmósfera tan especial.
A petición de Zamora, las dos primeras intervenciones del acto fueron de dos compañeros de profesión: Elías León Siminiani, director con el que realizó su primer trabajo, y Paula Ortiz, directora con quien presenta en el Festival su proyecto más reciente, La virgen roja. Curiosamente, ambos utilizaron símiles parecidos a la hora de describir a su compañera y amiga.
León Siminiani, entre risas, la comparó con un globo aerostático que, desde que dejó de trabajar con él, “no ha parado de subir y subir”. Ortiz, por su parte, celebró que una productora como Zamora fuera la merecedora del premio, destacando que su labor ayuda a los creadores a volar. “Ella es quien nos prepara el despegue, quien sostiene nuestras alas durante el vuelo y quien nos ayuda a aterrizar”. Y al igual que su compañero, Ortiz destacó que Zamora en cada vuelo “se atreve a llegar más alto”.
En su turno de palabra, el Ministro de Cultura Ernet Urtasun, subrayó la labor de los productores como “un eslabón poco visible pero capital en la cadena de talento que desemboca en una película”. En referencia a la premiada, dijo “que asume constantemente riesgos y que prioriza el valor social del hecho cinematográfico”, y elogió su trabajo “con el que ha fortalecido la presencia del cine independiente español en el mercado internacional”.
Asimismo, aplaudió la capacidad de Zamora para impulsar el talento de muchas mujeres dentro de la industria. Urtasun aseguró que con su trabajo “Zamora ha propiciado que el talento y el esfuerzo de muchas otras mujeres llegue a donde debía haber llegado naturalmente, rompiendo atávicas desigualdades, silencios, violencias y discriminaciones que aún persisten”. Finalmente, le agradeció “hacer de nuestro cine un lugar mejor”.
Y por fin, llegó el turno de la premiada. Zamora compartió su felicidad con los presentes, no sin antes admitir que previamente había sentido el llamado ‘síndrome del impostor’.
La productora aprovechó su discurso para pedir a Urtasun “una Ley del Cine valiente, capaz de proteger al cine español y luchar por una cinematografía igualitaria”. En ese sentido, Zamora afirmó que “en igualdad no basta con estar de acuerdo, hay que pasar a la acción”, al tiempo que apoyó la promoción de políticas de cuotas “hasta que ya no sean necesarias”. Además, señaló que “la conciliación es una quimera a la que debemos hacer frente”.
debemos hacer frente”. Zamora también dedicó un espacio para reconocer el trabajo de sus compañeros de profesión. Previamente, había admitido que su éxito se debe a haberse rodeado de grandes profesionales. “Nuestros cineastas también son marca España”, sostuvo. Entre ellos, mencionó especialmente a Carla Simón, realizadora catalana que “le abrió nuevos horizontes y marcó un punto de inflexión en su carrera”.
Zamora concluyó su intervención con unas emotivas palabras dirigidas a sus hijos, presentes en el acto: “Sois mi inspiración. Si con mi trabajo puedo ayudar a crear un mundo más tolerante, esto va por vosotros”.
Iker Bergara