"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Presencia habitual en el Zinemaldia (donde en 2013 ejerció como presidente del Jurado y donde hace un par de años clausuró Perlak con The Velvet Underground), este año presenta en esta última sección May December, un melodrama protagonizado por Natalie Portman y Julianne Moore. La primera encarna a una actriz de Hollywood que se desplaza hasta Savannah (Georgia) para conocer a una mujer a la que tiene que interpretar en una película. Dicha mujer, encarnada por Moore, fue la protagonista de un escándalo al mantener una relación con un menor de edad que ahora es su marido.
Esta película, como Lejos del cielo, está muy vinculada al subgénero del melodrama femenino, muy imbuida del espíritu de autores como Douglas Sirk.
¿Tú crees? No sé. En Lejos del cielo sí tomé a Sirk como referencia, también a Fassbinder. Son dos autores que me encantan. Pero May December presenta un estilo más plano, menos sublimado, incluso el modo en que usamos la música de Michel Legrand. En esta ocasión quería crear un relato mucho más austero.
Pero en el diseño de personajes sí que está muy presente esa huella.
Sí, ahí sí porque al final estamos recreando un ambiente doméstico con personajes muy cotidianos, aunque también me interesaba aplicar sobre ellos un marco que crease una cierta distancia emocional con el espectador. Por otro lado, en el melodrama clásico los personajes se sentían muy perdidos y al final se les redimía mediante un happy end. No es nuestro caso. En nuestra película no hay nada de eso.
Es muy interesante el personaje de Natalie Portman. Ella busca documentarse sobre la mujer a la que da vida Julianne Moore de cara a interpretarla, pero da la sensación de que ya la ha juzgado previamente. ¿Se reconoce en esa obsesión del creador de tenerlo todo bajo control?
Bueno, yo creo que entre ambas se da una relación de ambigüedad. El modo en que el personaje de Natalie Portman se relaciona con la mujer a la que da vida Julianne Moore pasa por diferentes puntos de vista. A mi me gusta esa ambigüedad porque refleja esa incertidumbre. Cuando eres joven eres curioso por naturaleza y estás todo el rato haciéndote preguntas, aunque no sé si eso vale para los jóvenes de hoy (risas). Pero según vas cumpliendo años necesitas tenerlo todo mucho más claro. Lo que sí es cierto es que me gusta estimular la duda en el espectador, conducirle a un espacio de incertidumbre y ahí la experiencia que atesoro como director juega también a mi favor.
Muchos han señalado que la historia que cuenta en May December puede asumirse como el reverso caustico de un film como Lolita.
No sé si nuestra película puede asumirse como una sátira, sinceramente. Hay un cierto humor cuando el film rompe abruptamente con ese tono austero, eso sí. Lo que es verdad que cuando un hombre tiene una relación con una chica mucho más joven no se le cuestiona tanto como si es una mujer la que hace lo mismo. A partir de ahí lo que sí hay en nuestra película es una reflexión sobre las relaciones de poder que se dan en una relación de esta naturaleza.
En esta película saca mucho partido a las localizaciones.
Sí, cuando llegamos a Savannah, supe que era el sitio ideal para ambientar esta historia. Al principio pensamos rodarla en Maine, pero aquello le daba a la historia un tono muy “Peyton Place” y, además, teníamos que rodar en otoño y el otoño en Maine no permite recrear cielos primaverales, así que optamos por cambiar las localizaciones. El clima de Georgia es húmedo, pegajoso, te impregnas de él en cuanto bajas del coche y le daba a los personajes la temperatura emocional necesaria para esta historia.
Jaime Iglesias Gamboa