"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
LA MOSCA (1986)
Cronenberg cruzó en esta película, de forma magistral, dos materiales tan distintos como lo emocionante y lo grotesco. Remake de un clásico de ciencia ficción de los 50, parte de un experimento científico que sale mal para convertirse en un film fundamental sobre la ambición, la identidad, la imposibilidad de reconocernos a nosotros mismos y el dolor al no poder reconocer al otro. Interpretada
por los inmensos Jeff Goldblum y Geena Davis, es, además, uno de los mejores dramas románticos de los 80.
INSEPARABLES (1988)
Película única, irrepetible, que arroja una mirada nueva sobre ideas recurrentes del cine de género a la vez que crea otras. Cuenta la historia de dos hermanos gemelos (Jeremy Irons en el mejor papel de su carrera), ambos ginecólogos, que mantienen un extraño vínculo de dependencia. La aparición en sus vidas de una mujer (Genèvieve Bujold) pone en peligro esa relación y sirve a Cronenberg para componer un film que lleva al límite las secuelas sobre el cuerpo y la mente de las relaciones emocionales tóxicas.
CRASH (1996)
Inspirada en el libro homónimo de J.G. Ballard, Crash es una de las películas más controvertidas del cineasta. Se centra en un grupo de personas que encuentran el placer en los accidentes automovilísticos y es
una especie de bucle perverso e hipnótico en el que Cronenberg utiliza el dolor, el sexo y la adicción para volver a explorar el cuerpo. Escurridiza y arisca al impedir la empatía con los personajes, Crash es aún hoy una reflexión pertinente sobre el medio y nuestro lugar como espectadores.
UNA HISTORIA DE VIOLENCIA (2005)
Pocos thrillers de su década hay con tanta fuerza, capas y ambición. Cronenberg aparca el elemento fantástico, pero en ella coinciden prácticamente todos sus temas esenciales: posibilidad de una violencia atroz en las relaciones afectivas, identidad y convivencia sigilosa de lo cotidiano y lo monstruoso. Es la historia de un padre de familia que ve peligrar su estabilidad con la
visita de alguien que conoce su pasado. Y el inicio de una interesantísima colaboración entre Cronenberg y Viggo Mortensen.
PROMESAS DEL ESTE (2007)
Un thriller sobre mafias y poder, bien distinto a Una historia de violencia, aunque compartiendo a un Mortensen más hierático y menos ambiguo. El actor encarna al chófer del líder de una familia mafiosa instalada en Londres. Influye mucho en el hijo de este, y cambia de forma de pensar al conocer a la comadrona interpretada por Naomi Watts. Con arrebatos de violencia inusitada, como la pelea en los baños turcos, y un espléndido retrato de los mecanismos que llevan de servir y callar a dominar.
Desirée de Fez y Quim Casas