El Kursaal acogió ayer la rueda de prensa de Competencia oficial, la película que ha inaugurado la sección Perlak de esta edición. En ella participaron los tres intérpretes protagonistas Penélope Cruz, Antonio Banderas y Óscar Martínez, el productor Jaume Roures y, vía online, los dos directores argentinos del film: Mariano Cohn y Gastón Duprat.
Repleta de humor negro, Competencia oficial reproduce la lucha de egos entre dos reconocidos actores y una excéntrica directora durante el rodaje de una película producida por un empresario multimillonario que aspira a dejar huella.
Teniendo en cuenta que en la vida real el trío protagonista ha participado en cientos de rodajes de toda índole y condición, no fue extraño que nada más empezar la rueda de prensa se les planteara la siguiente cuestión: “¿Os habéis llegado a sentir identificados en algún momento con las exageradas situaciones que muestra el film?”.
“Mmmm… no me parecen situaciones tan exageradas” respondió Antonio Banderas, provocando las risas de los asistentes. Pese al tono jocoso de su respuesta, el malagueño reveló posteriormente que Cohn y Duprat habían “sabido criticar con acierto comportamientos que se producen en el mundo del arte y, particularmente, en el cine”.
En la misma línea, Penélope Cruz apuntó que “Competencia oficial sabe sacar humor al proceso de preparación de un largometraje, pero sin ridiculizar la profesión”. Además, añadió que “hay muy pocas películas buenas sobre rodajes” y que esta era una excepción.
Por último, el actor argentino Óscar Martínez afirmó no haber vivido nunca situaciones tan extremas. Aunque admitió que “el trabajo de preparación de un actor es tan personal que, en ocasiones, se ven cosas muy extrañas”.
Curiosamente, los dos directores aseguraron que cuando comenzaron a trabajar en la película no tenían pensado hacer una comedia, simplemente les salió. Pese a que sus anteriores trabajos también se mueven en ese terreno, el dueto argentino piensa que no son unos especialistas del género. “Nosotros intentamos mostrar nuestra visión de la realidad y el resultado termina siendo ese”.
Por su parte, Penélope Cruz afirmó que la comedia es un género que siempre le ha fascinado. “La gente piensa que es más fácil de hacer y no es así”. Por eso, admira el trabajo de directores como Cohn y Duprat. “Son muy sabios. Saben reírse del absurdo y lo hacen con una gracia muy atractiva”.
Su compañero de reparto, Antonio Banderas, también se mostró muy satisfecho con el resultado final. “En todo momento hemos tenido la impresión de estar haciendo algo diferente”, dijo.
Rodaje divertido
Una de las premisas a la hora de grabar la película era que todo el mundo se divirtiera durante la filmación. “La gente no lo sabe, pero un rodaje es muy aburrido. Son horas y horas muertas grabando planos y contraplanos”, explicaron Cohn y Duprat. Por eso, en Competencia oficial plantearon las escenas con una cámara testigo para que los intérpretes pudieran interactuar y explayarse sin ataduras. Martínez confirmó que “esa forma de rodar no es frecuente en el cine y agradeció a los directores la oportunidad de hacerlo”.
Para los directores, Competencia oficial es una comedia coral donde todos y cada uno de los que han participado han puesto su “cuota de maldad”; por ejemplo, para crear el narcisista personaje que interpreta Penélope Cruz. “Nunca revelaremos los nombres de las personas reales en las que nos hemos inspirado para crear ese Frankenstein”, zanjó la actriz.
La rueda de prensa adquirió un tono más serio cuando, en sus últimos compases, los protagonistas fueron consultados por el apoyo que la industria recibe en nuestro país. Banderas fue muy contundente y crítico: “Durante las últimas elecciones, en los debates televisados, ninguno de los representantes políticos dedicó una sola palabra al cine, a la música o a la pintura. Cuando pasa eso te das cuentas de que estás un poco dejado de la mano de Dios”.
Iker Bergara