"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Umibe no kanojotachi / Along the Sea narra la historia de tres jóvenes vietnamitas, inmigrantes ilegales en Japón. El interés por esta temática se remonta a 2016, cuando Akio Fujimoto (Osaka, Japón. 1988) conoció a varios extranjeros que venían a trabajar a Japón: Llegaban de manera legal, con sus visados aprobados, por lo que él no tenía constancia de que la población migrante recibiera un trato injusto o fuera explotada a su llegada. Sin embargo, poco después, a través de Facebook, contactaron con él unas mujeres que se encontraban en una situación muy delicada y estaban escribiendo a diversas personas pidiendo ayuda. Él no pudo —o no supo— hacer nada en aquella ocasión, perdió el contacto y arrastró durante mucho tiempo el peso de no saber qué habría sido de ellas. Por otro lado, la mujer del director es originaria de Myanmar y está muy sensibilizada con la situación de las mujeres inmigrantes que llegan a Japón y compartía a menudo con él sus historias, lo que, unido a la historia de aquellas chicas que resonaba en su cabeza, le llevó a iniciar el proceso de investigación para preparar la película que ahora estrena: “La sociedad japonesa, en general, no está al tanto de estas situaciones. De vez en cuando aparece alguna noticia en los periódicos… Además, cuando hablamos de extranjeros, hay muchos tipos. En concreto, a mí me interesaban las personas procedentes del sudeste asiático, que en Japón se les ve únicamente como mano de obra barata y nadie sabe exactamente cómo viven o a qué se dedican. A diferencia de Europa, en general en Japón la gente no está acostumbrada a convivir con extranjeros”.
La película busca adentrarnos en la realidad de las mujeres que se encuentran dominadas por los sistemas burocráticos de las leyes de extranjería, sin derecho a la asistencia sanitaria, desde una posición que busca ser lo más honesta y realista posible: “Más allá del tono artístico, o dramático, lo que a mí me interesaba era transmitir al público la sensación de estar junto a estas chicas, atrapadas en sus vidas ordinarias. No quería dejar la cámara en un trípode mientras actúan, de ahí que la filmación, cámara al hombro, me permitiera introducirme en el núcleo de la acción y transmitir la historia desde una perspectiva más cercana, como si la audiencia estuviera en esa isla con ellas”.
Participar en New Directors es un deseo hecho realidad para él y todo su equipo —con el que ya rodó su ópera prima Boku no kaeru basho /Passage of Life, 2017— ya que, desde el rodaje, soñaban con la idea de que la película fuera presentada en el Zinemaldia: “Es un año muy especial por las circunstancias derivadas de la pandemia mundial. En Japón hay mucho debate en relación con si se deben celebrar los festivales de cine o se deben posponer temporalmente. Me parece muy importante que San Sebastián haya apostado por un festival presencial, donde las personas pueden acudir a las salas de cine de nuevo, y es algo que me ha dado mucha esperanza, ya que en Japón no se sabe qué va a pasar”.
Amaiur Armesto