"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Bajo la filosofía de ‘galas de autor’ que desde hace dos años se ha implantado en las ceremonias del Festival de Cine de San Sebastián, se presentaron ayer las directrices de lo que habrán de ser las galas de la
presente edición, marcadas inevitablemente por la pandemia que venimos sufriendo en los últimos meses.
Si hace un par de ediciones el motivo principal de la gala de inauguración dirigida por Borja Cobeaga,
Diego San José y Borja Echevarría fue el humor; y el pasado año, Borja Crespo apostó por el cine de género como hilo conductor, en esta edición, música, danza y poesía (la lírica en definitiva), más necesarias que nunca, quieren ser protagonistas. La responsabilidad la asume un tándem guipuzcoano: el bailarín y coreógrafo Jon Maya se ha encargado de la dirección de las cuatro galas (inauguración, clausura, Premio Donostia, Cine Vasco), con guion del escritor Harkaitz Cano.
Tal y como indican los dos artistas, se ha buscado una cierta unidad a las cuatro galas, tanto narrativa como estética, a pesar de que cada una represente una función diferente. Ello se ha transformado sobre todo en un reto colectivo, muy dinámico y estético, con números de danza y actuaciones musicales en directo; montajes en los que intervendrán no sólo músicos (bajo la dirección de Luis María Moreno Urretabizcaya, Pirata) y bailarines (como los miembros de la compañía Kukai, dirigida por el propio Maya), sino también ilustradores o diseñadores audiovisuales.
La distancia del erizo
Y como no podía ser de otra manera, la situación de pandemia que se está viviendo también estará presente en las galas. “No podíamos darle la espalda a lo que está sucediendo porque nos está condicionando el día a día a todos, y también al propio Festival. Ha cambiado nuestro software mental y nuestra forma de relacionarnos, nuestros miedos se han acrecentado, y nuestros prejuicios se han moldeado. Todo ha cambiado”, explica Cano.
Por eso, el concepto de distancia se convierte de algún modo en eje vertebrador de las galas. Lo explica el escritor con la metáfora del erizo: “Si los erizos están demasiado cerca se hieren, pero en invierno, si están demasiado lejos unos de otros, mueren de frío”. Y se reivindica la vuelta a la sala de cine de forma segura como vía para reducir distancias humanas. “La distancia más corta entre dos puntos es una película”.
La ceremonia de apertura de esta noche será retransmitida en directo por La 2 de Televisión Española, ETB1, eitb.eus y la página web del Festival. Las tareas de presentación correrán a cargo de Cayetana Guillén Cuervo, Eneko Sagardoy, Miren Gaztañaga e Inma Cuevas. En la misma, se presentará a los miembros del jurado de la Sección Oficial, presidido este año por el cineasta italiano Luca Guadagnino, y un momento que se antoja especialmente valioso será cuando José Luis Rebordinos invite a su homólogo de Cannes, Thierry Frémaux, a subir al escenario para pronunciar un discurso de apoyo a todas las citas cinematográficas que han sido canceladas, o se están viendo tan afectadas este año por el coronavirus.
Gonzalo García Chasco