"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Penelope Cruz, imagen del Zinemaldia de este año y Premio Donostia, recibe el reconocimiento a una carrera que comenzó con tan solo dieciséis años. Sus papeles en La niña de tus ojos, Volver y Vicky, Cristina, Barcelona le valieron el Goya a la mejor actriz. Su papel en el film de Woody Allen le permitió además obtener un Oscar.
“Llegué al cine con una actitud casi militar, diecisiete años haciendo ballet clásico supongo que algo tuvieron que ver”, dijo la actriz madrileña que también hizo referencia al “valor del trabajo” que le inculcó su familia. Ya con cuatro años le gustaba jugar sola a interpretar, “jugaba a ser otras personas y con eso sentía mucha libertad. Incluso aprendí a conocerme más a mí misma”.
La interpretación también le ha permitido estudiar el comportamiento humano, “es algo fascinante. Nunca se termina de aprender la complejidad del ser humano. Lo que nos mueve y nos motiva”.
Y es que al preparar sus personajes e intentar comprenderlos mejor, la actriz está segura de que “se crece como persona, ya que te hace tener mucha más empatía, comprensión y compasión, en especial hacia personajes que quizás no sería gente con la que te tomarías un café”.
Penelope, a la que describieron como una “curranta”, aseguró que trabajar a destajo es su manera de agradecer a la vida poder vivir de lo que le gusta y da el máximo de ella misma en cada proyecto. “Nosotros estamos para servir a una historia y a un personaje”.
Ahora pasa más tiempo aquí que en EEUU, “desde que soy madre mis prioridades han cambiado”. Pero hace unos años la situación era distinta, "mi ventaja es que nunca cogí la maleta y me fui a la aventura. La primera vez que fui a trabajar a Los Ángeles lo hice con billete de ida y vuelta. Y siempre tuve claro que no quería abandonar mi carrera en Europa", dijo.
Cuando desde el Festival se le comunicó la concesión del premio su reacción fue de incredulidad: “‘¿Estás seguro Rebordinos? ¿No prefieres esperar unos años?’ Y como soy como uno de los personajes de Almodovar pensé, ‘¿no será que me va a pasar algo malo?’”, comentó prococando carcajadas.
De los rodajes, al ser procesos tan intensos, se queda con las relaciones tan estrechas que ha logrado a lo largo de los años y con descubrir culturas diferentes cuando viaja, “con la excusa de los personajes pregunto y aprendo mucho de otros lugares, culturas y gentes”.
Y por si ser imagen del Festival y Premio Donostia fuera poco, Penélope Cruz también presentaba Wasp Network, donde encarna a Olga Salanueva, esposa de uno de los espías que formaron parte de la trama de espionaje cubano que en los años noventa se infiltró en las asociaciones anticastristas de Miami.
Nora Askagorta