"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
En su breve incursión en el cine internacional, Mario Moreno, en arte Cantinflas, fue Passepartout en la faraónica versión de La vuelta al mundo en 80 días realizada por Michael Anderson en 1956, y a punto estuvo de encarnar a Sancho Panza en otra película del mismo productor, el megalómano Michael Todd, nada menos que con Cary Grant en el rol de Don Quijote. Pero tuvo que esperar más de tres lustros para meterse en la piel del fiel escudero cervantino en Don Quijote cabalga de nuevo (1973), una coproducción hispano-mexicana escrita por Carlos Blanco, dirigida por un Roberto Gavaldón en horas bajas y con Fernando Fernán Gómez como Alonso Quijano. Es un producto muy de su tiempo, de los que requerían mayor provisión de aspirinas que de altramuces: no han transcurrido dos minutos de proyección y el cámara ya nos ha bombardeado con, por lo menos, veinte zooms, de avance o de retroceso.
Don Quijote cabalga de nuevo mete en la coctelera muchos motivos del clásico de la literatura española, la agita bien agitada y los vierte alegremente a lo largo de más de dos horas, incluyendo cita al Tirant lo Blanc de Martorell. Y tiene la ingeniosa idea de incorporar a la historia, como convidado de piedra, al propio Cervantes, bajo los rasgos de Javier Escrivá. Quizás John Huston viera la película de Gavaldón y decidiera incluir, como personaje de ficción, a Rudyard Kipling en El hombre que pudo reinar (1975). El atropellado itinerario posee el atractivo, relativo pero atractivo al fin y al cabo, de contemplar a un puñado de actores de carácter de nuestro cine, entre ellos José Orjas, Agustín González, Luis Morris, Emilio Laguna, Manuel Alexandre, Valeriano Andrés (acreditado como Valeriano de Andrés) y el entrañable Valentín Tornos, el Don Cicuta de Un, dos, tres… responda otra vez, que a ojos del hidalgo es una bella princesa (¿Doña Cicuta de la Mancha?). Y a actrices de tan diverso pelaje como María Luisa Ponte, Laly Soldevila, Diana Lorys o Mary Francis, nombre artístico de Paca Gabaldón (con “b”).
Aunque Fernán Gómez es un gran Quijote, el rey de la función es Cantinflas: en los créditos, su nombre aparece antes del título; el del actor español, después. El popular cómico mexicano atravesaba ya un período de decadencia, pero aún le funcionaban las pilas montándose sus numeritos de incontinencia verbal, sus trabalenguas y juegos de palabras, algunos de veras brillantes, como su respuesta a la pregunta “¿Lo confesará todo de su vida?”: “¡Y todo de bajada!”.
Jordi Batlle Caminal