"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Se desveló la sorpresa: Joker, uno de los filmes más esperados de este año, se proyectará el próximo sábado en el Festival en una sesión a las seis de la tarde (Teatro Victoria Eugenia) que coincidirá con otras cinco proyecciones a la misma hora en otras tantas salas de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia y Zaragoza. “Alegra esa cara” era la frase que podía leerse en la portada del diario del Festival del lunes. Al día siguiente se anunció esta múltiple proyección ideada por el Festival y Warner Bros. Pictures España, y el sábado próximo será una realidad: la sonrisa del Joker ya está aquí.
Surgido del universo del justiciero enmascarado de Gotham City, Joker siempre ha tenido mucha entidad por sí mismo. En su novela gráfica de 1988 “La broma asesina”, el guionista Alan Moore dio una visión de esta némesis del mal muy distinta a la acostumbrada y, desde entonces, a finales de los ochenta, el villano con la cara maquillada y la eterna sonrisa que le procuran dos cortes limpios en las comisuras de los labios, como si fuera el protagonista de “El hombre que ríe” de Victor Hugo, ha sido uno de los personajes más fascinantes y recurrentes del universo 'batmaniano'.
En Joker adquiere cartas de nobleza por sí mismo. Ya no es el villano, el rival, el oponente de… El director Todd Phillips (en otro paso más fuera de la comedia descabezada tipo Resacón en Las Vegas) y el actor Joaquin Phoenix se acercan al personaje con visiones más angulosas. El filme ganó el León de Oro en la reciente Mostra de Venecia.
Joker siempre ha sido un personaje malsano pero, al mismo tiempo, un villano carismático. Antes lo interpretaron César Romero, en la teleserie pop de los años sesenta, y Jack Nicholson en el film de Tim Burton consagrado a la rivalidad entre Joker y Batman. Christopher Nolan le confirió un sentido aún más trágico y sicótico en el segundo jalón de su trilogía sobre el caballero oscuro, con los rasgos de Heath Ledger. Ahora es Joaquin Phoenix quien regala al público y a sí mismo una interpretación magistral para explicar los orígenes del personaje, el porqué de su locura (ha sido en muchas historias el criminal más peligroso encerrado en el famoso Arkham Asylum) y las razones por las que se convierte en una amenaza cuando antes su única intención era hacer reír a la gente. Es el Joker pero, sobre todo, es Arthur Fleck, un tipo común y transformado en un mundo que le desborda.
Joker tiene una mitología propia y a recrearla en pantalla han ayudado Robert De Niro, en un personaje ideado para el film; Scott Silver (guionista de The Fighter y 8 millas); Bradley Cooper, en calidad de productor, y la compositora islandesa Hildur Guonadóttir, colaboradora del fallecido Jóhann Johannsson.
Quim Casas