"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
La directora canadiense Louise Archambault ha llevado al cine la novela de Jocelyne Saucier “Y llovieron pájaros”, un canto a la libertad, el amor, la esperanza y la valentía, una historia de decisiones, aislamientos –impuestos y voluntarios– de segundas oportunidades. Elegir sin que la edad sea un freno.
La directora compite en Sección Oficial con la adaptación a la gran pantalla de la novela homónima de Jocelyne Saucier, en la que tres viejos ermitaños conviven en un bosque de la región de Québec, tras la muerte inesperada de uno de ellos, dos mujeres irrumpen en su vida inalterable casi al mismo tiempo.
La temática del tercer largometraje de Archambault es muy diversa: el pésimo tratamiento de los enfermos mentales, las violaciones en los psiquiátricos, la recuperación de la memoria histórica, en este caso por un brutal incendio acontecido en Canadá, el arte como medio de expresión de catástrofes, la eutanasia como acto de libertad, la constante medicación en la tercera edad o la vital importancia del contacto con la naturaleza.
Pero por encima de todo, “esta película trata de amor y libertad, luego cada personaje aborda microtemas y sus historias se cruzan”, señaló la realizadora. “También el aislamiento y la imposibilidad de amar, pero quería mostrar la esperanza de que, pase lo que pase, no es cuestión de edad, sino de cómo utilizamos las posibilidades en la vida”, destacó.
La entrañable Y llovieron pájaros destaca por su relato, adaptado de la novela homónima de Jocelyn Saucier. Aunque la estructura de la novela es diferente, la directora ha resaltado más el carácter dramático de los personajes, “pero las escenas íntimas o la muerte de Tom, ya estaban en la novela, aunque en la novela Tom no era cantante. En la película se expresa sobre todo mediante sus canciones”.
“Yo tiendo a elegir personajes atípicos, dar voz a los que no la tienen. Vivimos en un mundo sombrío y la película nos da esperanza y luz a través de personajes que no son perfectos pero tienen mucho bagaje”, declaró. “Y son personajes muy valientes. A una edad avanzada toman una increíblemente valiente decisión; ellos no se acomodan sino que deciden aislarse en la naturaleza y empezar una nueva vida en libertad”, añadió el actor Gilbert Sicotte.
Preguntada por ello, la directora también explicó que los cuadros y fotografías que se ven a lo largo de la película y que forman parte del argumento, están hechas expresamente para la película. Las pinturas son de un conocido pintor canadiense, Marc Séguin, que se sorprendió muchísimo al ver la conexión que existía incluso entre el argumento de la película y su serie de pinturas Forêt (bosque).
Louise Archambault también adelantó que su próximo trabajo será una coproducción con España y lo rodará en Santiago de Compostela. Sin poder dar más detalles, contó que se trata de la historia de una “desagradable” mujer de 40 años, con tres hijos, que de un día para otro da un giro su vida y decide viajar a España, donde comenzará a darse cuenta de que quizá el problema esté en ella.
Nora Askargorta