"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
No es la primera vez que Delphine Lehericey (Lausana 1975) acude al Zinemaldia. En 2013 ya presentó en New Directors (sección en la que ahora repite) su ópera prima Puppylove. Tampoco es novata en el Festival Laetitia Casta, quien el año pasado presentó en Sección Oficial L’Homme fidèle. En esta ocasión vuelve como protagonista de Le Milieu de l’horizon, segundo largometraje de Lehericey, un drama familiar ambientado en la Suiza de los años 70 en el que una mujer felizmente casada con un granjero y madre de dos hijos adolescentes (personaje al que da vida Casta) resuelve tomar las riendas de su propia vida y abandonar el hogar al iniciar una relación amorosa con otra mujer.
La cineasta suiza justificó la elección de Laetitia Casta para el papel aduciendo que la actriz “entiende muy bien el mundo de la infancia, algo que para este personaje se me antojaba fundamental. Además necesitaba un rostro popular, alguien con quien el público pudiera empatizar fácilmente y Laetitia me ofrecía esa posibilidad, su personaje representa a todas las mujeres”. La actriz, por su parte, afirma que el mayor reto que le planteó el papel de Nicole fue “lograr que el espectador pudiera comprenderla sin llegar a juzgarla, pues lo que le ocurre a ella en el film es algo que le puede pasar a cualquiera. Yo creo que resulta un personaje ejemplar, en el sentido de que es coherente con sus deseos y eso es una enseñanza que deja a sus hijos: el hecho de que por mucho que se nos cuestione o se nos ponga bajo sospecha, lo más importante es ser fiel a ti mismo”. En este sentido, Casta cree que aunque este personaje es bastante diferente a los que había interpretado hasta ahora, “en el fondo, lo asumo como una evolución de mis trabajos anteriores”.
Laetitia Casta, que empezó a trabajar profesionalmente como modelo, piensa que el cine “tiene un potencial enorme a la hora de enviar mensajes importantes a la ciudadanía, mucho más que la política”, justificando así su participación en Le Milieu de l’horizon. La directora del film asume que su película posee una importante carga reivindicativa aunque no cree que en ella esté retratando la especificidad suiza: “Es cierto que mi país fue el último lugar de Europa donde se aprobó el sufragio femenino y que hay muchos cantones donde las parejas homosexuales aún no pueden contraer matrimonio, pero yo creo que lo que cuento en mi película es universal, es una historia que podría haber sucedido en cualquier lugar de Europa”. La acción de Le Milieu de l’horizon transcurre durante la ola de calor que asoló Europa Central en 1976: “Me interesaba retratar en paralelo el cataclismo que tiene lugar en el seno de la familia protagonista y la catástrofe natural que supuso aquél verano de temperaturas extremas. Además, los años 70 me parecen una época muy interesante porque durante aquél período aconteció la segunda gran oleada de reivindicaciones feministas”.
Por otra parte, Delphine Lehericey reconoció que le interesaba contar mucho la historia a través de la mirada de un adolescente ya que “se trata de una época de grandes cambios y justamente ese es el tema del que quería hablar en esta película”.
Jaime Iglesias