"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Judi Dench ha sido M en ocho de las películas de James Bond, ha interpretado a mujeres de fuerte carácter y a damas shakespereanas como Ofelia en Hamlet, Julieta o Lady Macbeth. A sus 83 años, lleva más de 60 actuando y tras participar en innumerables películas y obras de teatro, “no me atrevo a rechazar ningún papel porque pienso que no voy a volver a trabajar”, confesó ayer al poco de llegar a la ciudad, haciendo gala en todo momento de una increíble humildad, “sólo me preocupa tener trabajo mañana”.
Preguntada por el secreto de su éxito, ha insistido en no menospreciar la suerte. “Lo he hecho lo mejor que he podido: siempre tengo en cuenta lo que me dicen, tomo apuntes y pruebo otra cosa al día siguiente. Es suerte en gran parte, no es que seas la única ni la mejor. Eso, no hay que olvidarlo nunca”. Dice haberlo aprendido todo observando a los demás y es lo que aconseja cuando le preguntan al respecto.
La jefa de James Bond, la mujer que acumulasiete nominaciones al Oscar en los últimos 20 años, recordó sus comienzos: “Yo quería ser diseñadora de teatro, empecé a formarme para ello y querría seguir ahora, pero quizá es un poco tarde”, bromeó. Pero una visita a un montaje del El rey Lear le hizo cambiar de opinión. “Yo nunca sería tan buena, no tenía esa imaginación, así que decidí seguir los pasos de mi hermano y me apunté a la Escuela de Arte Dramático”, contó la británica.
“No me atrevo a rechazar un papel por si es el último que me ofrecen”
Sus primeros pasos en la interpretación los dio en el teatro ya que su primera prueba para el cine fue desalentadora. “Una persona que ya no vive y que jamás desvelaré quien fue, me dijo, ‘Gracias por venir, pero nunca harás cine porque en tu cara todo está mal’”, recordó la actriz que además de recibir el Premio Donostia presenta en el Zinemaldia la película de espías Red Joan, basada en la vida de Melita Norwood, la espía británica del KGB.
Repasando los momentos más memorables de su carrera y las personas cuyo apoyo considera decisivas, la intérprete también recordó que después de morir su marido rodó The Shipping News, junto a Kevin Spacey, “estaba muy mal, y él fue una ayuda inestimable para mí, me alegró la vida en aquel momento”.
Al salir el nombre del actor, defenestrado profesionalmente tras las investigaciones por los casos de agresión sexual, dijo no poder aprobar “de ninguna manera lo que dicen que ha hecho”, pero al mismo tiempo subrayó que “es un actor maravilloso y un buen amigo” y cuestionó que Ridley Scott lo sustituyera, una vez filmada su parte, por el actor Christopher Plummer en Todo el dinero del mundo.
“Me pregunto si tenemos que hacer esto en toda la historia, ¿tenemos que excluir de la historia del cine a cualquier persona que se haya comportado mal o haya cometido algún tipo de crimen? ¿Desechamos toda su filmografía por ello?”, planteó.
Nora Askargorta