"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Puede que lo amen. Que amen al maldito viejo que de joven filmó Al final de la escapada, El desprecioo Pierrot, el loco, uno de cuyos fotogramas simbolizó la edición 71 de Cannes, 40 años después del festival de mayo del 68 que él ayudó a derribar.
Puede que lo amen. Que amen al maldito viejo que firmó Yo te saludo, Maríay luego Je vous salue, Sarajevo.
Puede también que lo odien. Que lo odien porque hace tanto tiempo que abandonó (si es que alguna vez filmó así) la narrativa clásica. Pueden odiar al Godard de Adiós al lenguajeo Film socialisme. Aunque sería una pena. Un suicidio. Odiar al autor de Histoire(s) du cinémaes, creo, una confesión de no entender que cualquier cosa que hagas con la cámara, desde un primer plano a un travelling, es una cuestión moral. Y dejarte arrebatar por ello, sucumbir ante ello, también.
Amarán al Godard de La Chinoisey puede que odien al JeanLuc de Liberté et patrie, pero la impresionante sinfonía caleidoscópica que es Le livre d ́ imageles aturdirá, maravillará, dislocará, zarandeará, subyugará con sus granates saturadísimos, con su auténtico ‘sampleo’ y ‘scratcheo’ de imágenes, sonidos, letras, encuadres, voces y miradas que se distorsionan entre ellas, se atraen y se repelen, se tuercen y retuercen. ¿Cómo no entregarse aunque signifique al mismo tiempo ahogarse, evanecerse, destruirse en este maelströmen el que giran, como arrastrados por un huracán, Goya y Jean Vigo, Montesquieu y Johnny Guitar, Cervantes y Marilyn Monroe, el sueño de las 24 imágenes por segundo y los videos de las ejecuciones del ISIS?
Así amen al documentalista que se reencontró con Rohmer y lo filmó. Y a Woody (forza, maestro) también. Que invitó a Juan Goytisolo a Nuestra música. Así odien al viejo áspero, salvaje y tímido, Le livre d ́ imageles interrogará con sus reflexiones sobre la política, la sociedad y la imagen misma. Les manipulará, leal, con su control beodo del ruido y la furia. Les aplastará y les levantará de nuevo.
Alguien le ha llamado “joven punk”. No, Godard no es ya joven. Ni falta que le hace. Tampoco lo es la Agnès Varda insuperable de Rostros y lugares. Ni lo fue el Manoel de Oliveira de El viejo de Belén, filmado con 107 años. No, es un viejo sagaz, asqueado, capaz de poner su voz en off y desbaratarla al máximo mientras los planos que filma se remontan ellos solos. Un viejo que mira hacia delante con ira. Y ama al cine de una manera abisal. Lo amen o lo odien, vivirán Le Livre d ́ image como un ascenso a los infiernos del mundo y un descenso a las maravillas de un Séptimo Arte feroz.
Begoña del Teso