"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Los dos primeros episodios de los seis que conforman la primera temporada de “La peste” (se está trabajando ya en una segunda temporada) prefiguran bien el tono, los temas y personajes que habremos de encontrar a lo largo de esta ficción. La nueva propuesta de Alberto Rodríguez, esta vez para el medio televisivo, nos traslada a la Sevilla de finales del siglo XVI, cuando esta ciudad, convertida en una nueva Babilonia, era el principal puerto de partida hacia el nuevo mundo. La serie, meticulosa en la ambientación, demuestra un especial interés por parte de Alberto Rodríguez por acercarse muy físicamente a los personajes y ambientes, sin rehuir la crudeza o sordidez que, comprensiblemente, una plaga de peste desencadena. “Hay algo muy físico planteadodesde el principio. Quería que el espectador viajara por la Sevilla del siglo XVI a pie de calle. Me interesaban los personajes cotidianos, no los grandes nombres que salen en los libros de historia”, explica el director.
Pero sobre todo, “La peste” ofrece lecturas sociales perfectamente vigentes hoy en día. “Hemos querido que la actualidad estuviera presente”, indica el guionista Rafael Cobos. Los autores reconocen que la reciente crisis económica o la corrupción son aspectos que tienen su reflejo en la trama. Por eso, aunque sea una serie de época que introduce elementos de género como una investigación criminal, muy reconocibles y habituales en el cine de Rodríguez, “La peste” no hace sino reflejar cuestiones como el abuso de poder, el olvido de los más miserables, la confrontación entre razón y superstición, o el empoderamiento de la mujer: “Utilizamos el género para hablar de otras cosas”, explican los autores. “Nos ayuda a entender mucho mejor el presente”, añade la actriz Patricia López Arnaiz.
CINE Y TELEVISIÓN SON COMPATIBLES
“La peste” se ha convertido en la primera serie de televisión que el Zinemaldia ha proyectado en la Sección Oficial, aunque haya sido fuera de concurso. Resulta ineludible para el director de La isla mínima comentar este hito y lo que significa por el debate candente sobre la relación entre cine y series de televisión: “Yo quiero que la gente siga yendo a las salas de cine, pero es compatible con la televisión. Por eso, para mí espositivo que los directores de cine demos el paso a las series, al menosen producciones de este tipo de calidad, en la que no hemos tomado el camino fácil. Hay diferencias de producción, pero no tantas”.
Para Paco León, uno de los protagonistas, el hecho de que esta serie se haya incluido en la Sección Oficial de San Sebastián es un síntoma de que se están difuminando las barreras entre formatos. “El consumo del audiovisual es cada vez más flexible, y la conexión entre formatos es buena”, añade Cobos. En última instancia, Rodríguez lo tiene claro: “Yo sigo haciendo una historia para que se vea en una sala oscura o en un buen monitor, no en un móvil. Para mí, ver una película o una serie en un móvil es como beber un buen vino en un vaso de plástico”.
GONZALO GARCÍA CHASCO