"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
El cine nos ofrece historias en las que, a veces, nos sentimos reflejados. La realidad de Carlos Vargas en La educación del Rey, es una de ellas. Tras dedicar su vida al trabajo, el futuro se le presenta pesado, sin sentido. Hasta que Rey llega a su vida. Una bonita historia, si obviamos que el joven aterriza en el patio de Carlos escapando de la policía por cometer un robo. Es entonces cuando Carlos le ofrece arreglar los daños que ha provocado a cambio de no entregarlo a la policía. Este es un relato sobre el aprendizaje, en el que ambos perso-najes se necesitan para sobrevivir. Tal y como nos explica Santiago, “esta historia estuvo guardada en un cajón durante años y tuvimos varios intentos de retomarla. Necesitábamos construir un mundo donde asentar a sus personajes”. Santiago habla en plural porque fue su coguionista, Juan Manuel Bordón, quién un día se presentó con un esbozo que mostrarle: “Me dijo que tenía una idea sobre una historia y me trajo un pequeño boceto de los dos personajes principales”. Santiago lo tuvo claro desde el principio: “El material tenía vida. Los protagonistas, desde su amanecer más temprano, tenían algo que era bello”. También sabía que esta historia no podía representarla cualquiera. Aquí es donde entran Germán Silva y Matías Encinas, los actores principales: Germán tiene un largo recorrido, “podría sentarse aquí y empezar a actuar sin tener un guion preparado”, nos cuenta Santiago. Sin embargo, nos explica que Matías “nunca había actuado” y es esa relación “que excede un poco a la ficción” la que determina que esta película “se haya construido de una manera tan especial y única”. Otro de los motivos que determina la magia de este largo es que, en su inicio, fue creada como una miniserie de 8 capítulos, presentada en Cine en construcción y lanzada en Argentina, para pasar después a la gran pantalla. “Para mí es muy importante estar ahora presentándola aquí. Es como un cierre. Este Festival me dio un impulso muy fuerte para poder hacerla. Por eso ligo el festival a la existencia de la película”. Santiago nos confirma que está preparando su próximo largo: “La que iba a ser mi primera película ahora será la segunda”.
MARÍA ARANDA