"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Dolores Fonzi participó en el Fes- tival de San Sebastián hace 15 años, cuando sólo tenía 21 años. Ahora re- gresa como jurado de la Sección Ofi- cial, un encargo que acoge con mucha ilusión, ya que le permite disfrutar pero también aprender cerca de per- sonalidades a las que tanto admira.
¿Qué supuso la invitación para acu- dir al Festival como jurado?
Que me hayan llamado ha sido un honor. Creo que si hay que hacer de jurado, San Sebastián es uno de los mejores lugares. Se come increíble, junto al mar, la gente está en muy buena onda y, encima, ves películas. Para mí es como estar de vacaciones. Es como el sueño de cualquier per- sona a la que le guste el cine, y a mí me encanta.
Es una gran experiencia, pero a la vez también será mucha respon- sabilidad ¿no?
Sí, pero no me lo tomo con solemnidad. Aprovecho para conocer gente nueva, personas a las que admiro. Por otro lado, todo lo que sea argumen- tar y discutir sobre arte es fructífero. La responsabilidad está, pero también siento que el mismo regalo que nos dan al ser jurado es el regalo que nosotros devolvemos a las películas según nuestra subjetividad. Es una experiencia muy gratificante.
¿Qué cualidades debe cumplir un buen jurado?
En principio creo que lo más impor- tante es llevarse bien para que sea una experiencia agradable, ya que se pasa mucho tiempo con este equipo. Es como si por una semana esta fuera tu familia. Por otro lado el equipo debe ser heterogéneo para poder ver di- ferentes puntos de vista.
¿Qué valora usted en las películas y qué aporta a este jurado?
Depende de la película. Hay tantos premios que en cada película des- tacas diferentes cosas: las actuacio- nes, la fotografía, el guion... Al final, el premio es subjetivo, no significa que sea la mejor película del Festi- val, sino que va a ser la mejor película para nosotros. Creo que sobre todo aporto curiosidad, una mirada sobre las mujeres en la industria. Doy un punto de vista más feminista.
Además de como jurado, viene tam- bién como co-protagonista junto con Ricardo Darín con la película La Cordillera –Premio Donostia a Ricardo Darín– ¿Qué supone venir en estas dos facetas?
Me encanta. Dos por uno. Sobre todo porque es acompañando a Ricardo, que es un amigo muy querido además de un actor al que admiro y res- peto mucho, ya que llevamos años trabajando juntos. Que le entreguen el Premio Donostia es emocionante. Además, poder mostrar la película en San Sebastián, en un ámbito tan amoroso, es maravilloso, me siento muy orgullosa.
¿Cuáles son sus próximos proyectos?
En octubre estreno El futuro que viene, dirigida por Constanza Novick sobre dos mujeres, la amistad entre nosotras, las chicas, en las diferentes etapas de la vida. También voy a ha- cer teatro con Cecilia Roth.
NAIA DÍEZ