"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Las cerca de tres mil personas que se acercaron ayer al Velódromo pudieron escuchar un concierto muy visual basado en adaptaciones de bandas sonoras de seis películas españolas recientes que fueron interpretadas en directo por la Orquesta de Euskadi y el Orfeón Donostiarra bajo la dirección de David Hernando Rico. Esta experiencia, que ya se ha desarrollado en otras ediciones, cuenta con un público incondicional de todas las edades, aficionado a la música y al cine, que disfruta en el recinto más grande y popular del Zinemaldia de forma gratuita. Sobre la pantalla gigante de 400 metros cuadrados se proyectó un montaje de escenas de las películas creado especialmente para esta ocasión por Carlos Rodríguez de Morgan Crea.
El programa del concierto reunió las suites o adaptaciones de las bandas sonoras de Alatriste, de Agustín Díaz Yanes con música de Roque Baños; Mi gran noche de Álex de la Iglesia (banda sonora de Joan Valent); Lobos de Arga de Juan Martínez Moreno (Sergio Moure), El ladrón de sueños de Ángel Alonso (Pascal Gaigne); Libertarias de Vicente Aranda (José Nieto) y La pelota vasca de Julio Medem (Mikel Laboa). Hubo momentos trepidantes en los que se unía la fuerza de las imágenes seleccionadas con una música vibrante, como en Alatriste o incluso en la de animación El ladrón de sueños. A ratos, se palpó una carga de emoción, como con “A las barricadas”, la canción popular del anarcosindicalismo durante la guerra civil española que acompañó las imágenes de Libertarias. Pero el momento culminante llegó al final del concierto. Impresionante la versión del “Txoria Txori” y del “Baga, biga, higa” de Mikel Laboa, que fue revivido en el escenario por el barítono del Orfeón, Jon Imanol Etxabe, mientras se proyectaban imágenes de La pelota vasca. Su timbre de voz, su tímida actitud en el escenario y hasta su eterna boina ladeada recordaron al cantautor donostiarra y los intérpretes tuvieron que repetir el “Baga, biga, higa”.
Antes del concierto, el presidente de la Fundación SGAE, Manuel Aguilar, se refirió a la importancia que tienen este tipo de actividades que contribuyen a “crear aficionados para el cine” y deseó que a los asistentes les quedaran ganas de ver estas películas enteras después de ese aperitivo. También subieron al escenario para saludar al público los compositores Pascal Gaigne, Joan Valent y Sergio Moure, y el director general de la Orquesta Sinfónica de Euskadi, Oriol Roch.
La OSE y el Orfeón se han acercado al cine en otras ocasiones. La última, el pasado mes de enero, cuando grabaron la banda sonora que el compositor vasco Fernando Velázquez creó para Un monstruo viene a verme de Juan Antonio Bayona que se presenta en el Festival.