"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
El cineasta pekinés Liu Yu vuelve a optar al Premio Kutxabank-Nuev@s Director@s tres años después de participar en la misma sección con su ópera prima, Ci yan de yang guang /The Blinding Sunlight, una película documental autofinanciada, con la que obtuvo importantes premios a nivel internacional.
Su segunda película es una modesta y muy recomendable producción que narra con mucha sensibilidad y sencillez el día a día de Han, un anciano nonagenario que vive con su hijo que está a punto de cumplir los 60 años y tiene una discapacidad mental absoluta. Padre e hijo viven juntos en un sencillo apartamento en el sur de Pekín, y entre los dos completan los 150 años a los que hace referencia el título del filme.
El viejo Han está cada vez más torpe, cansado, y afectado por una enfermedad que no tiene cura. Consciente de que su larga vida está llegando a su fin, tiene una única preocupación: qué será de su hijo cuando él no esté.
En realidad, Han tiene dos hijas más, aunque éstas apenas los visitan, y además, se han quedado con su pensión y ahora quieren vender el piso del padre.
El egoísmo, la avaricia y la excesiva frialdad de las hijas contrasta con la inmensa humanidad que desprende el anciano, cuyos valores no parecen haber sido heredados por las chicas.
Una película con muy pocos diálogos, en este caso totalmente innecesarios, con unos silencios que transmiten bien la rutina de estos personajes, su soledad, el gran esfuerzo físico, la impotencia o la tristeza, y un tratamiento del sonido muy especial. El ruido estridente del tráfico o las chicharras del descampado acentúan la angustia o el desamparo de los personajes.
ANE MUÑOZ