"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Las 2.500 personas que acudieron al mediodía de ayer al Velódromo pudieron disfrutar de un concierto “en vivo” interpretado por la Orquesta Sinfónica de Euskadi basado en fragmentos de bandas sonoras de películas con imágenes de las mismas proyectadas en una pantalla de 400 metros cuadrados.
Los compositores Alfonso de Vilallonga, Fernando Velázquez, Joan Valent, Pascal Gaigne y Alberto Iglesias crearon estas partituras para las películas Blancanieves de Pablo Berger; Loreak, de Jon Garaño y Jose Mari Goenaga; Lasa eta Zabala, de Pablo Malo; Todo sobre mi madre, Hable con ella, La mala educación y La piel que habito de Pedro Almodóvar; Zipi y Zape y el club de la canica, de Oskar Santos y Las Brujas de Zugarramurdi, de Álex de la Iglesia. En las dos últimas bandas sonoras, un grupo del Orfeón Donostiarra sumó sus voces al potente sonido de la OSE y el maestro Roman Gottwald dirigió la parte musical.
No es la primera vez que la Fundación SGAE y la OSE llevan a cabo la iniciativa de combinar música y cine dentro del Zinemaldi, pero el hecho de trasladar el concierto al Velódromo, uno de sus escenarios más populares, ha permitido dar más relevancia a esta actividad que ha sido reforzada con la presencia de varios de los compositores.
C.G.