"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Segunda película de su director, Tetsuichiro Tsuta, The Tale of Iya (2013) nos adentra en una forma de vida harto olvidada. La película se rodó durante un año (se constata en el filme el paso de las estaciones) en el valle de Iya, en Shikoku, en los alrededores donde nació el propio director. Es una suerte de fábula poderosa sobre la relación entre la naturaleza y el hombre, así como una reflexión acerca de la conservación del medio natural y el progreso/modernidad. Haruma y su “supuesto abuelo” (el símbolo por excelencia de esa vida casi inexistente), viven de la caza en los montes y del intercambio. Haruma camina todos los días un buen trecho por montañas para acudir al instituto, y como todas las adolescentes tiene sus sueños, sus expectativas, pero también una reverencial relación con el hombre que la ha criado. Su abuela vive rodeada de muñecos de paja (espantapájaros) que simbolizan a todos aquellos que han marchado o muerto (impresionante cuando cobran vida en una suerte de sueño espiritual). Hay una comuna de ecologistas que hará todo lo posible por parar las obras de un túnel que conectará Ia con la “civilización”, y un recién llegado de la ciudad que quiere rehacer su vida en el pequeño pueblo. Con una bellísima fotografía, un indudable aliento poético y una muy medida y sabia mezcla entre elementos oníricos y realistas, Tsuta es capaz de situarnos ante un verdadero dilema: ¿es el progreso lo mejor que le ha pasado al hombre?
GLORIA FERNÁNDEZ (CINEASIA)