"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
El estreno de El último adiós de Bette Davis traerá esta tarde a Donostia el recuerdo de uno de los momentos más inolvidables de la historia del Festival, cuando la estrella de Hollywood llegó a recoger el Premio Donostia en 1989. A sus 81 años y a pesar de su delicada salud, Bette Davis viajó desde Los Ángeles a San Sebastián y en sus cuidadísimas apariciones volvió de nuevo a ser la diva que fue.
El documental ha sido producido por el canal de televisión TCM y dirigido por Pedro González Bermúdez. “En TCM pensamos que, ahora que se cumplen 25 años de aquella visita, era una muy buena ocasión para realizar un documental. Mi amigo Juan Zavala nos había contado la experiencia de 1989, cuando la estrella llegó al Festival y cómo para la ciudad y para todos ellos fue el año de Bette Davis, y solo con la emoción que nos transmitía ya supimos que ahí había una historia. Así que nos pusimos a trabajar sobre la idea original de Juan, hicimos juntos el guion y yo lo he dirigido”.
El último adiós de Bette Davis recoge los testimonios del entonces director del Festival Diego Galán, del director escénico Jaime Azpilicueta que planificó con la actriz cada una de sus apariciones públicas, de la secretaria general del Festival Pilar Olascoaga, periodistas, fotógrafos... hasta 18 entrevistados que recorren todo lo ocurrido durante aquellos inolvidables cinco días.
Entre todos los testimonios, Pedro González se detiene especialmente en la colaboración de Kathryn Sermak, la asistente personal que acompañó a Davis en aquel viaje y persona de confianza durante la última etapa de su vida. “Fue la entrevista más complicada de conseguir: la actriz la nombró heredera, y ella creó una fundación en su memoria, pero nunca había hablado mucho en público. Afortunadamente, le gustó la idea y ese recuerdo cariñoso de la ciudad tantos años después. Conseguimos que viniera y hacer la entrevista en la misma habitación 415 que ocuparon entonces”.
A pesar de la complicación, el documental ha podido ser completado en un tiempo récord -cuatro intensos meses- y el realizador asegura haber disfrutado mucho con el proyecto: “Soy muy cinéfilo, y conocía a la actriz y su filmografía, pero tenerla tan cerca ha sido increíble: Bette Davis me ha enamorado; a pesar de su delicado estado físico, qué fuerza y qué carácter, para bien y para mal, cómo organizó cada detalle de su estancia y cómo revivió gracias a la poderosa fuerza del cariño del público”.
En aquellos días de septiembre de 1989, Pedro González Bermúdez tenía 14 años y comenzaba el bachillerato en su Carabanchel natal. No podía imaginar entonces que, 25 años más tarde, sería un reconocido realizador en la cadena TCM, conseguiría el Premio Goya 2012 por su documental sobre Luis Buñuel Regreso a Viridiana y estaría hoy en Donostia presentando El último adiós de Bette Davis en la sección Zabaltegi del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
P.Y.