"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Ayer al mediodía tuvo lugar en el Museo San Telmo la ceremonia de entrega del Premio Nacional de Cinematografía, que en su edición de 2014 ha reconocido la dilatada trayectoria de Lola Salvador, una de las más reputadas guionistas españolas. Muchos han sido los que han visto en este galardón no solo una recompensa al trabajo desarrollado por esta profesional todoterreno sino un reconocimiento, a través de su figura, a quienes escriben para el cine.
“Lola Salvador no es únicamente una cineasta polifacética. Es una persona comprometida con su oficio y con la defensa del mismo”, manifestó el ministro de Educación, Cultura y Deportes, José Ignacio Wert, en el elogio que hizo de la premiada tras la entrega del galardón. Lola Salvador, por su parte, tiró de ironía a la hora de calificar a los guionistas como una suerte de bichos raros: “Somos como las vacas: nos exprimen, nos ordeñan y de vez en cuando nos mandan al prado a pastar”, comentó parafraseando a Scott Fitzgerald al resumir éste su experiencia como guionista en el Hollywood de los años 30. “Nuestro oficio es el de contar cuentos, convencer, transformar un mundo injusto en algo parecido a Jauja; somos Quijotes de día y Scheherezades de noche”. En la reivindicación de su profesión que llevó a cabo en su discurso, Salvador manifestó asimismo que “el día que acaben con los guionistas, acabarán con el cine”, tras lo cual apostilló irónicamente: “y con esto no quiero arle ideas a nadie”.
Maestra de cineastas
Entre los asistentes se contaban muchos de los amigos y colegas de Lola Salvador, actores, actrices, directores, compañeros guionistas, pero también profesionales vinculados al mundo de la docencia y la enseñanza, ya que, como puso de manifiesto el jurado del Premio Nacional de Cinematografía a la hora de fallar el galardón, éste pretende reconocer, entre otros méritos “su singular aportación a la creación cinematográfica, su larga trayectoria como maestra de cineastas, su compromiso constante con el cine en el ámbito educativo y su contribución decidida a la defensa colectiva del sector y los derechos de los creadores”.
Esta concepción de la propia profesión como una disciplina heterogénea ocupó buena parte del discurso del ministro Wert al evocar los trabajos de Lola Salvador para la segunda cadena de TVE, fecunda cantera de cineastas “donde se formaron, junto a Lola, profesionales de la talla de Pilar Miró, Antonio Drove, Jaime Chávarri, Josefina Molina, Fernando Méndez Leite y tantos otros”. De entre los trabajos realizados por la galardonada en el ámbito televisivo, el ministro también destacó su labor en la adaptación a España de un formato como “Barrio sésamo”: “Gracias a Lola y a su trabajo de adaptación hoy en día muchos niños españoles distinguen perfectamente entre arriba y abajo”, comentó Wert despertando las sonrisas del auditorio.
Al acto también asistieron el alcalde de San Sebastián Juan Karlos Izagirre y la diputada foral de Cultura de Gipuzkoa, Ikerne Badiola, entre otras autoridades. J.I.