"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Recién llegado a San Sebastián, el director de cine mexicano Amat Escalante apenas ha tenido tiempo para tomar tierra y comenzar a visionar los trabajos que se presentan este año en el XII Encuentro Internacional de Estudiantes de Cine cuyo Jurado preside. Con un equipo integrado por alumnos de las escuelas participantes, Escalante evaluará trece cortometrajes de los estudiantes de cine de otras tantas nacionalidades, que otorgarán los Premios Panavisión y Agencia Freak a los mejores trabajos. Ellos tendrán que elegir también los nombres de los tres directores que participarán el próximo año en el Festival de Cannes, en el apartado Short Film.
“Será muy interesante encontrarse con estos nuevos valores, y me da un poco de respeto, pero pienso que puedo aportar una perspectiva diferente de lo que es el aprendizaje del oficio del cine”, comenta el realizador mexicano. Escalante, realizador de tres largometrajes de éxito y galardonado en numerosos festivales, es de formación autodidacta, lo que no ha sido obstáculo para convertirse en uno de los valores más significativos del cine mexicano actual. “Yo no he tenido una escuela formal, pero he dedicado muchos años de mi vida a aprender y a estudiar”, recuerda. “Dejé la escuela a los 15 años para dedicarme al cine, y desde entonces me convertí en autodidacta: estudié mucho por mi cuenta, hice algunos cursos de cine, tomé otro específico de documental pero, sobre todo, he leído sobre cine todo lo que he encontrado y he visto y sigo viendo muchísimas películas.”
“De una u otra manera, yo creo que todos hemos sido estudiantes, cada uno con su trayectoria –afirma–. Lo más importante es que formar parte de una escuela es pertenecer a una generación y aprovechar el intercambio y la riqueza de aprender de lo que hacen los otros, con los que estás en el mismo momento y con inquietudes muy parecidas”.
Escalante confiesa haber tenido mucha suerte en su vida, pues contó desde sus inicios con el apoyo de un amigo de su familia que creyó en su trabajo y en sus primeros cortometrajes y fue quien le apoyó y financió para poder llevar a término su primer largometraje, Sangre. “El segundo largo, Los Bastardos, fue un poco más fácil porque en México ya había un estímulo fiscal que ha permitido que salgan adelante muchas películas, y además conté con fondos europeos de Francia y de Holanda”.
El año de México
Escalante coincide con los especialistas en la buena salud actual del cine mexicano. “Sin duda, ha sido un año muy interesante para México, que ha tenido las dos películas más taquilleras de la historia: Nosotros los nobles de Gary Alazraki y No se aceptan devoluciones, de Eugenio Derbez, que han arrasado en la taquilla; esta última consiguió que el día del estreno fueran 750.000 personas a verla”, recuerda. También el año pasado Carlos Reygadas regresó galardonado del Festival de Cannes con Post Tenebras Lux, “y eso, considera Escalante, es también parte del año de México “.
P.Y.