"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
A los pocos minutos de haber recibido el Premio Fipresci en la gala inaugural, el cineasta tunecino Abdellatif Kechiche compareció, junto a su productor Brahim Chioua, en una abarrotada sala 2 del Kursaal para presentar al público donostiarra La vida de Adèle, la película que, al margen del galardón que le entregaron en el Zinemaldia, le valió la Palma de Oro en el pasado Festival de Cannes. “Es precioso venir aquí y ver la sala así –confesó el director ahondando en la impresión que causa entre quienes visitan el Festival asistir a una proyección a medianoche a sala llena–. Estoy muy contento de presentar ante vosotros esta película que refleja una hermosa aventura humana”.
Para Kechiche: “La vida de Adèle es una historia de pasión amorosa pero no me gusta presentar la película dando mi visión de los personajes, creo que esa es una tarea que os corresponde a vosotros, el público”. A juzgar por la cerrada ovación que tuvo lugar tras las tres horas de proyección, la valoración de la audiencia no pudo ser más positiva.
J.I.