"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
“Revisando este vídeo casi termino agotada, ¡hay que ver la cantidad de películas que he hecho y lo deprisa que pasan los años!”, confesó una emocionada Carmen Maura en referencia al montaje audiovisual que el Festival proyectó como antesala a la entrega del Premio Donostia, el primero que se concede a una actriz española: “Lo acepto esperando que este galardón abra camino y otras muchas de nuestras actrices lo obtengan en el futuro”. Del estatus de la actriz como símbolo del cine español habló el director Álex de la Iglesia, encargado de entregarle el premio: “Carmen atesora todo lo que de bueno tiene nuestro cine: es lanzada, pasional, posee una fuerza arrolladora y se crece en la adversidad. Lo mejor de ella como actriz está por llegar”.
Carmen, que no acostumbra a dedicar los galardones que recibe, quiso compartir en esta ocasión el premio “con mis padres y con mis dos hijos que sufrieron las consecuencias de mi deseo de ser actriz. Fue una decisión repentina que adopté en apenas veinte minutos pero vistos los resultados, todos aquellos follones quedaron, de sobra, compensados”. Entre los momentos más felices de su vida profesional quedan “aquellas primeras visitas al Festival de San Sebastián cuando no había agentes de prensa y nosotros mismos empapelábamos la ciudad con carteles de nuestra peli y dormíamos un montón de gente en la misma habitación del María Cristina”, recordó la actriz entre las carcajadas cómplices del público.