"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Con una carrera de cuatro décadas en el cine, el teatro y la televisión, Tommy Lee Jones, presencia habitual en el cine de acción, visita el Zinemaldia con una comedia. Hope
Springs narra los problemas de una madura pareja que ha perdido la pasión y se encuentra anclada en la más aburrida rutina.
La solución llega cuando la mujer decide apuntarse, con su marido, a una terapia intensiva de pareja. El gruñón marido, interpretado por Tommy Lee Jones, accede a regañadientes por su esposa, papel que interpreta Meryl Streep. “Trabajar con Meryl es una alegría constante. A menudo no te levantas sonriendo todos los días por lo que tienes que rodar, y cuando trabajas con ella, todo son sonrisas”, comenzó diciendo el actor de rostro rotundo.
Más allá de la relación de pareja, la virtud de esta película surge desde su temática que aborda el deseo y la sexualidad en la tercera edad, despojada de la burla o el estereotipo al que Hollywood recurre cada vez que explora el sexo en ancianos. “Pero yo ni escribo una columna sobre consejos matrimoniales, ni soy terapeuta de parejas, así que aunque me pregunten, no voy a dar ningún consejo de pareja”, declaró este actor que se encuentra en el polo opuesto a lo que se considera una estrella en Hollywood al hablar de Hope Springs de David Frenkle, ganador de seis premios Emmy y director, entre muchas otras, de El Diablo viste de Prada. Tommy Lee Jones, el actor que pasó de imprescindible
secundario a protagonista, obtuvo un Oscar al Mejor ActorSecundario por su encarnación del intransigente Marshall Sam Gerard en el gran éxito de taquilla El fugitivo. “Este papel fue muy importante en mi carrera,
sin él hoy no estaría aquí. Me divertí mucho en el rodaje. La verdad es que como actor me he divertido en todas mis películas”.Tres años antes había obtenido su primera nominación al Oscar por dar vida a Clay Shaw en JFK de Oliver Stone, con quien ha trabajado en tres ocasiones. En 2007, su trabajo en el aclamado filme En el Valle de Elah le valió otra nominación al Oscar, y ese mismo año protagonizó la película ganadora del Oscar No es país para viejos, de Joel y Ethan Coen.
En la mayoría de sus película es un hombre de acción: “Pero yo no tengo un género favorito, dicen que en la variedad está el gusto. Busco los mejores guiones y equipos. Y lo mismo opino acerca de mi rostro cuando me preguntan por él. Ni siquiera sé qué aspecto tengo ahora, es algo a lo que no presto atención, sólo busco buenos proyectos”.
Pero además de todos los personajes que ha creado de manera brillante, el actor norteamericano ha ejercido de guionista, productor y director. Tras debutar con el largometraje Los tres entierros de Melequiades Estrada, el Cum Laude en Literatura por la Universidad de Harvard, Tommy Lee Jones, se prepara para dirigir su segunda película The Homesman. La cinta contará la historia de un pionero en la Norteamérica del Siglo XIX, al que dará vida el propio Jones también guionista y productor del filme. “Comenzamos con este rodaje el 25 de marzo en el noreste de México. Me encanta
dirigir, aunque es difícil y cuando lo he hecho han sido los días más felices de mi vida creativa. Además si en una película haces todo, de director, de guionista, de productor y de actor, tres de estos trabajos hacen que el cuarto sea más fácil”, bromeó el Premio Donostia.
Y es que Tommy Lee Jones recogió el anteúltimo premio Donostia de esta edición ayer: "Todo el mundo conoce el Festival a nivel mundial, pero yo no conocía esta bellísima ciudad hasta ayer, mi estancia está siendo muy feliz y placentera”.
N.A.