"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Cineasta polémico y huidizo, implacable cronista del desastre contemporáneo para algunos y
pornógrafo de la imagen para otros, Ulrich Seidl no deja de ser un misterio irresoluble. Aunque últimamente parece decantarse hacia la ficción –véase la excelente Import/Export (2008)–, el grueso de su obra desde su debut a principios de los ochenta se centra en el documental. O eso parece, pues la cosa no está tan clara en artefactos tan extraños El gran misterio como Animal Love (1995) o Models (1999). Incluso en Jesus, du Weisst (2003) la duda brota al instante,pues se trata de una mirada a la religión a través de algunos fieles que parecen desnudar su alma ante la cámara. ¿Hasta qué punto es eso real o impostado?. Los encuadres de Seidl tienden hacia el retrato distanciado e irónico de los “personajes”, pero su mirada no es agresiva, ni siquiera socarrona.Ylas historias que recoge nos parecen tan delirantes que podrían surgir tanto de la experiencia de esos creyentes como de la bulliciosa imaginación del cineasta. No importa, no debe importar, pues no es un documental sobre el sentimiento religioso, sino una película sobre cómo filmar cuerpos que creen estar por encima del mundo y en realidad se mueven a ras de suelo. Quizá lo mismo que le sucede
a Seidl.
Carlos LOSILLA