"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
La separación de su mujer y la imposibilidad de ver a sus hijos sitúan a Santiago, un mexicano que vive en Madrid, en un momento personal depresivo y errático. La noche, su trabajo en un bar, sin amigos y sin rumbo, le encaminan angustiosamente hacia la tragedia y a un inesperado final.
Con este argumento construye el director Carlos Serrano Azcona ( Madrid , 1969) su película El árbol, presentada ayer en la selección que muestra lo mejor del cine latinoamericano en el Festival. Serrano compartió la primera proyección de su filme con el público del Kursaal y explicó, acompañado de parte de su equipo, qué es lo que quiere transmitir con su historia: “Cada uno interpretará la película a su modo, pero en toda ella está la angustia del protagonista, porque Santiago es una persona que está aburrida, perdida, deambulando por la ciudad, en una situación realmente muy dura”.
En su trabajo, Serrano utiliza recursos comunes a lo largo de toda la cinta, como por ejemplo situar la cámara sobre la espalda del protagonista. “Lo que quiero -afirma- es transmitir la soledad de Santiago, su angustia, por eso está tan encima de él la cámara, en la calle, en casa, en todos lados, para crear esa sensación de claustrofobia”. El director explica que es una muestra de una de las influencias más importantes en su cine, la de los hermanos Luc y Jean Pierre Dardenne (realizadores de Rosetta, Palma de Oro en Cannes 1999), que dan mucha importancia a esa perspectiva ya que, afirman, la nuca es la parte más vulnerable del ser humano.
Algunos otros aspectos de El árbol, como la luz natural, o el uso de la cámara sin trípode recuerdan también a otro de sus autores mas admirados, Lars von Trier y el cine Dogma, que –a su juicio– no sólo “ha creado un lenguaje distinto, sino que también ha permitido hacer buen cine con poco dinero”.
Desde el año 2006, Carlos Serrano tiene su propia productora, Estar Ahí Cinema, y con ella y en coproducción con Mantarraya Producciones de México, ha llevado adelante este largometraje, su primera experiencia como director y guionista. El árbol fue seleccionada dentro de Cine en Construcción en la pasada edición del Festival, y con ella ha participado ya en varios festivales internacionales. Son cerca de tres años los que ha durado este proyecto desde que comenzó a gestarse hasta su estreno y, según destacó Serrano, “su conclusión no hubiera sido posible sin la confianza y el esfuerzo que los productores Jaime Rosales, Jaime Romandia y Carlos Reygadas han puesto en mi trabajo,desde el principio hasta el final”.
P.Y.