El productor catalán Luis Miñarro no oculta lo que disfruta cada vez que viene a San Sebastián y “más este año -añade-, con el privilegio de poder valorar las catorce cintas que componen la selección a concurso de Horizontes Latinos”.
Miñarro es un buen conocedor del Festival, al que ha acudido ya en siete ocasiones: “El Festival ha ido ganando mucho sobre todo en las secciones paralelas, que son originales e interesantes, y posibilitan que los aficionados adquieran una panorámica de un autor o de una cinematografía o de un género, y eso me parece vital en un festival”. Sobre la Sección Oficial, destaca su calidad: “En ella las películas dependen más de la cosecha del año, y hay años mejores y peores para unas cinematografías y otras; pero como en la selección hay gente muy competente, que realmente ama el cine, se consigue muy buen reflejo de lo mejor de esa cosecha”, opina.
Luis Miñarro es productor de cine desde hace 13 años. Antes de crear su productora Eddie Saeta S. A., trabajó en el mundo de la publicidad, y ahora se dedica al cine que le gusta: el de autor y de nuevos realizadores.
“No es un camino fácil, asegura, pero lo difícil no es producir -yo ya llevo 14 películas- lo complicado es que llegue a la gente. El gran escollo es la distribución y la exhibición para este tipo de cine, porque los exhibidores en general arriesgan poco y te dejan poco tiempo para que una película pueda funcionar. Eso nos ha pasado con En la ciudad de Sylvia, la última de José Luis Guerin, que nos la retiraron en la tercera semana, cuando mejor iba”.
Manda la televisión
Miñarro compara la cinematografía latinoamericana actual, “seguramente con muchos menos medios”, con la que se hace en nuestro país, donde dice que “la gente ha perdido el entusiasmo”. “Somos una sociedad rutinaria y, aunque las cosas se hacen de forma profesional, no se mete el corazón. En cambio hay cinematografías como la argentina en la que tú ves que la gente, a pesar de las dificultades, mete el alma y mete el corazón y eso se nota en los resultados. La sociedad española está muy acomodada y no hay voluntad de innovación, ni siquiera entre los consagrados”.
Por otra parte, Luis Miñarro responsabiliza a la televisión de dominar la industria: “Las televisiones están apostando por una línea más comercial y con salida mediática, y el gran problema del cine español es que es un cine muy mediatizado por las parrillas, porque quien manda realmente en los formatos es la televisión, y ella ha ganado la batalla, con lo que es difícil conseguir cosas punteras”.
Además, recomienda que las políticas culturales apuesten por impulsar y promocionar la producción propia: “Debería haber una postura muy firme de los gobiernos para intentar que el cine que producimos aquí tenga como mínimo una buena salida en nuestro país. Pero es lastimoso, no defendemos ni lo nuestro. Nos fijamos en los grandes actores o realizadores, como el caso de Almodóvar, y al resto lo ninguneamos, y eso de valorar poco lo nuestro es algo atávico, yo creo que muy ibérico”, concluye.
Sin embargo, reconoce que hay buenas expectativas en el panorama creativo: “Yo veo muchos proyectos, y en España hay mucho talento, sobre todo de gente joven, lo que pasa es que estamos muy pocos productores que nos metamos en este tipo de películas”. En su caso, Miñarro reconoce que se dedica al cine “por devoción”: “No pretendo ganar dinero; lo nuestro es hacer posibles películas rodadas en video muy independientes, en nuevos forma-tos que difícilmente se acaban en 35 mm, y que tienen salidas en festivales internacionales y llegan a un público más marginal. Como son proyectos de menor presupuesto, puedo hacerlos, y se acaban por autofinanciar en un plazo relativamente corto”.
"El cine español está mediatizado por la televisión"
"La distribución es el gran escollo del cine de autor"
Pili YOLDI