"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Un año después de revolucionar el thriller policial con Cure (1997) y un poco antes de adentrarse en el relato de terror apocalíptico con Kairo (2001), Kiyoshi Kurosawa firmó dos atípicas películas insertadas dentro del género negro y articuladas alrededor de la venganza. Eyes of Spider y Serpent´s Path no sólo tienen en común estar protagonizadas por el actor fetiche del “direct-to-video” Sho Aikawa (rescatado más tarde por Takashi Miike en cintas como Rainy Dog o Zebraman): en ambas bulle un clima de extrañeza e imprevisibilidad muy acentuado que va tensando una atmósfera densa y turbia, en la que poco a poco se va destapando la atrocidad que esconde el comportamiento de los personajes.
Los instintos más bajos del ser humano adquirirán su razón de ser dentro del marco ritual de una película que explora los mecanismos del dolor y el sufrimiento que provocan el odio y el resentimiento. El ojo por ojo será la única ley que conozcan dos personajes unidos para llevar a cabo su particular vendetta contra una organización mafiosa encargada de realizar “snuff-movies”.
Kurosawa traza una espiral de violencia dentro de un panorama en el que se dinamitan las fronteras de la ética para adentrarnos en el retorcido territorio de la amoralidad. Con saña y sadismo asistimos a un obsesivo universo en el que no existe lugar para la piedad. Eso sí, al director no parece interesarle resaltar el elemento macabro, sólo mostrar con su precisa impasibilidad quirúrgica tras la cámara la esencia de la historia a través de una puesta en escena que se introduce en el estado mental de los personajes.
“El tiempo no fluye al revés, no eres Dios”, dice el personaje de Sho Aikawa mientras enseña matemáticas a sus alumnos. Y es que quizás a los dos protagonistas de Serpent´s Path les hubiera gustado dar marcha atrás para poder recuperar su pasado. Mientras, bajo la pátina aséptica y calculada de la cámara de Kiyoshi Kurosawa, sus seres se mueven como animales acorralados, torturados y carcomidos por sus propias conciencias; aunque, al igual que las fórmulas que el profesor escribe en la pizarra, sólo algunos sean capaces de descifrar la naturaleza frágil y torturada que se esconde tras la máscara de su monstruosidad.
Beatriz MARTÍNEZ