"Z365" o "Festival todo el año" es la nueva apuesta estratégica del Festival en la que confluyen la búsqueda, el acompañamiento y el desarrollo de nuevos talentos (Ikusmira Berriak, Nest); la formación y la transmisión de conocimientos de cine (Elías Querejeta Zine Eskola, Zinemaldia + Plus, Diálogos de cineastas); y la investigación, la divulgación y el pensamiento cinematográfico (el proyecto Z70, Pensamiento y debate, Investigación y publicaciones).
Ángela Molina nació en Madrid en 1955 en una familia dedicada por completo al mundo del espectáculo presidida por su padre, Antonio Molina, una de las grandes figuras de la canción. Hija mayor de un grupo de hermanos dedicados al cine y a la canción -Micki, Paula, Mónica- Ángela es a su vez madre de una de las jóvenes promesas del nuevo cine español, Olivia. La leyenda, confirmada por la propia Ángela en varias ocasiones, afirma que su carrera empezó con un reportaje de fotos publicado en la revista Fotogramas cuando aún no tenía 18 años. Pero Ángela demostró muy pronto que era algo mucho más serio que una cara bonita, sobre todo cuando Luis Buñuel la escogió para hacer de ella la Conchita sensual y caprichosa de Cet obscur objet du désir (Ese oscuro objeto del deseo), frente a la Conchita gélida y represora que interpretaba Carole Bouquet. Pasional e instintiva, se adapta a los personajes que hace suyos sin ningún esfuerzo. Chávarri la ha dirigido en cinco ocasiones, Gutiérrez Aragón la tuvo de actriz fetiche en tres, Borau la hizo sabia Sabina, mientras Bigas Luna la convertía en una Lola llena de fuerza. Ha trabajado en Italia y Francia, pero es en España donde ha alcanzado sus más grandes éxitos. Actriz de una belleza potente, a la que no le da miedo dejar ver las huellas del tiempo, demostró en Carne trémula de Almodóvar, que seguía siendo capaz de provocar grandes pasiones. Sus últimos trabajos han sido en El Mar, de Agustí Villaronga, y One of the Hollywood Ten (Punto de mira), de Karl Francis, en la que interpreta el personaje de la actriz mexicana Rosaura Revueltas. Ángela Molina ha participado en el Festival de San Sebastián en varias ocasiones. En 1986 ganó el premio a la Mejor Actriz por La mitad del cielo y hace un par de años fue una de las protagonistas de la Concha de Oro, El viento se llevó lo qué. Además de prestar su hermoso ojo aterciopelado para que Paco Rabal lo cortara en el cartel del Festival del año 1997.